viernes, abril 19, 2024

Internacionales

ATENTADO: Bomba en Londres y nivel de alerta «crítico»

Sharing is caring!

Una bomba estalló ayer en el metro de Londres causando heridas a 29 personas, otro hecho de terrorismo en la capital británica reivindicado por el Estado Islámico (EI), tras lo cual fue elevado el alerta a «crítico».

Lo confirmó a través de la agencia Amaq, órgano de propaganda de la organización yihadista, informó el portal de seguimiento de información terrorista Site.

La misma fuente precisó que según el EI, el ataque es obra de un «destacamento» del grupo.

El nivel de alerta terrorista en el país fue elevado de «grave» a «crítico» y se espera otro ataque, dijo la premier Theresa May.

De hecho, May anunció esta noche el despliegue de militares en Londres y en el resto del país para monitorear objetivos sensibles, en el marco de la operación Tempora, prevista desde hace tiempo y puesta en marcha tras los sucesos de hoy.

El artefacto usado contenía «probablemente mucho» Tatp (peróxido de acetona), un poderoso explosivo usado en general en los atentados del EI, dijo una fuente de la investigación a la CNN.

Según informó hoy la prensa local, ninguno de los 29 heridos se encuentra en grave estado, gracias a la providencial activación antes de tiempo del «timer» montado a la sustancia explosiva, una batería y algunas luces de navidad, colocados en un cubo cerrado, colocado dentro de una bolsa de supermercado.

El episodio tuvo lugar por la mañana, en el barrio residencial de Fulham, a bordo de un convoy repleto de estudiantes y de personas que iban camino al trabajo como cada día. Fue a pocos pasos del estadio del Chelsea, que anunció medidas de seguridad extra de cara al gran cotejo del domingo contra Arsenal.

Al mismo tiempo que se lanzó un intensa búsqueda del autor del atentado, quien todavía no fue hallado, tuvo lugar un duro cruce de palabras entre la primera ministra británica, Theresa May, y el mandatario Estadounidense, Donald Trump, que terminó por la tarde con un llamado telefónico de reconciliación.

El objetivo del ataque fue la línea verde (District Line), a la altura de la estación de Parsons Green. Testigos dijeron que hubo una llamarada, luego humo, y la sensación de sentirse como ratones en una trampa.

En tanto, con la apertura de las puertas del vagón, todos comenzaron a huir con tal desesperación que «el que se caía al piso era pisoteado», relató un testigo.

«Fueron minutos de verdadero pánico», sostuvo. Los pasajeros sufrieron heridas leves y contusiones. Los que estaban más cerca del dispositivo tienen quemaduras leves, muchos en el rostro.

Una veintena de personas debía permanecer en observación hasta en el no lejano Chelsea and Westminster Hospital. Las investigaciones sobre el atentado están en manos de la división antiterrorismo, mientras que las calles habitualmente tranquilas de Fulham se colmaron de patrullas policiales y ambulancias.

Un segundo paquete sospechoso fue destruido por los especialistas en explosivos. El perímetro de Parsons Green fue acordonado y se cerraron varias estaciones, a la vez que se evacuaron varios edificios de la zona, habitada en su mayoría por italianos y personas provenientes de países musulmanes.

Amos y Claudia, dueños del restaurante Gola, frecuentado a menudo por jugadores de fútbol del Chelsea y por su entrenador, Antonio Conte -está a un kilómetro del célebre estadio de Stanford Bridge- relataron su angustia cuando tuvieron que dejar hoy, a las apuradas, a su hijo de 8 años en la cercana Holy Cross School, totalmente vallada por precaución, como otras escuelas, con los alumnos bloqueados en el interior.

En tanto, un hombre sospechoso fue identificado, según SkyNews, por las imágenes de algunas cámaras de circuito cerrado diseminadas por toda Londres desde 2005, año en que la ciudad sufrió una ola de atentados. La premier May habló hoy de una acción «vil», planificada para causar «graves daños» a pesar que se trató de un dispositivo artesanal. «Londres condena a los odiosos individuos que usan al terrorismo para destruir nuestro modo de vivir…y, como ya demostró otras veces, nunca se dejará intimidar ni derrotar» dijo, por su parte, el alcalde de la ciudad, Sadig Khan.

El funcionario precisó que continúa la búsqueda del o los autores del ataque, aunque no precisó qué cantidad de personas están sospechadas.

Como si fuese poco, no faltó un irritante intercambio de palabras entre May y Trump. El mandatario estadounidense se expresó tras el atentado en Londres a través de Twitter, donde deploró el fácil acceso de los extremistas a Internet, pero también exhortó a Scotland Yard a ser «más reactiva» contra «malvados y dementes». Como respuesta, la policía del Reino Unido opuso un fastidioso «No comment» (Sin comentarios»).

May, sin embargo, no se privó de responderle a Trump en público mediante una indirecta: «Hacer especulaciones con las investigaciones en curso no ayuda a nadie».(ANSA).