Un alarmante panorama financiero emerge de la petrolera estatal YPF, que reportó una pérdida neta de USD 10 millones durante el primer trimestre de 2025.
Este resultado contrasta fuertemente con las ganancias de USD 657 millones obtenidas en el mismo período del año anterior, encendiendo las alarmas sobre la gestión de la compañía.
El balance presentado esta semana revela además una significativa caída del flujo de caja, que se redujo de más de USD 1.500 millones en diciembre pasado a USD 1.200 millones en apenas tres meses.
Esta merma se atribuye, en gran medida, a un disparado aumento del 20% en los costos operativos, impulsado principalmente por un gasto descontrolado en publicidad.
Fuentes con acceso a la petrolera señalan directamente a la gestión de Santiago Caputo para la campaña, quien manejaría la pauta publicitaria a través de su socio, Guillermo Garat. «Están gastando todo en la campaña, publicidad a periodistas amigos», afirmó una fuente a LPO.
Resulta llamativo que, en una administración que pregona el ajuste del gasto público, la «motosierra» no parezca haber llegado a YPF.
Los gastos administrativos experimentaron un crecimiento impactante del 46% en el primer trimestre de 2025, incluyendo el reparto de USD 11 millones en sueldos entre los once directores.
La situación financiera de YPF ha impactado negativamente en el mercado, con una caída del 24% en el valor de su acción durante el último año.
El balance de YPF, si bien es público por su cotización en bolsa, se publica únicamente en inglés, lo que dificulta su acceso y comprensión para el público general y requiere un alto grado de sofisticación técnica para su análisis. Esta opacidad en la presentación de sus números genera interrogantes sobre la transparencia de la gestión de la empresa con mayoría estatal.
Dentro del rubro de gastos operativos, que incluye desde inversiones tecnológicas hasta publicidad y sponsoreo, la lupa se centra ahora en el manejo de los fondos destinados a la campaña publicitaria, generando preocupación por el impacto de este gasto en la salud financiera de la principal empresa del país.