jueves, abril 25, 2024

Internacionales

Una reina de la belleza, muta en jefa narco

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«La Señora», la misteriosa mujer detenida esta semana y presentada como la jefa del Cártel de los hermanos Beltrán Leyva, irrumpió en la escena pública como una rareza en el mundo del crimen.

La biografía de Clara Elena Laborín era totalmente desconocida para la mayoría de los mexicanos y es hasta ahora que algunos cronistas de la llamada «Nota Roja» comenzaron a divulgar algunos detalles.

Se sabe que era la esposa del narcotraficante Héctor Beltrán Leyva, apodado «El H» y detenido en 2014, y que también fue reina de belleza en su natal estado norteño de Sonora.

Según la Procuraduría General de la República (PGR) asumió «parte del liderazgo» de la organización que comandaba su marido cuando éste fue detenido y se le atribuye haber sido la «principal generadora de la violencia que se vive en el puerto de Acapulco», el legendario paraíso veraniego del Pacífico, hoy convertido en un verdadero infierno.

La Señora fue detenida en su casa en la ciudad de Hermosillo, capital de Sonora, y se le halló en posesión de dos kilos de cocaína y armas de fuego, cuando estaba con un hombre llamado Alan, conocido como «El Cha», supuesto operador financiero del Cártel de los Beltrán Leyva.

La banda se creía disuelta, con algunas células funcionando en enclaves estratégicos del sur de México, pero ahora se estima que se estaría reagrupando. Según datos que han comenzado a aparecer en los medios, Cara Elena fue secuestrada en abril de 2010 por hombres armados que la sacaron de su propia vivienda en Hermosillo y estuvo en cautiverio por más de una semana.

Las autoridades estiman que el plagio fue ordenado por Ignacio Coronel, uno de sus socios, que buscaba vengarse del secuestro y asesinato de su hijo Alejandro.

Al liberarla, según narra el cronista Héctor de Mauleón, la dejaron sobre una vereda «atada de pies y manos y con el rostro cubierto por una venda» y sobre su cuerpo había un papel que decía «nosotros te vamos a enseñar a ser hombre y respetar a la familia, asesino de niños Héctor Beltrán Leyva».

Héctor Beltrán se hizo cargo del Cártel dirigido por su hermano Arturo Beltrán Leyva en 2009, cuando fue asesinado por la Marina mexicana en la ciudad de Cuernavaca, a 70 kilómetros al sur de la capital.

Otro de los hermanos, Alfredo Beltrán Leyva, «El Mochomo», se encuentra detenido desde 2008, pero su hijo del mismo nombre, que es sobrino del jefe criminal Joaquín «El Chapo» Guzmán, disputa a éste el imperio que lideraba hasta el 8 de enero pasado, cuando fue recapturado tras su fuga de prisión, por medio de un túnel de 1.500 metros de largo.

A Alfredo hijo, conocido como «El Mochomito», se le atribuye el temerario secuestro de 3 hijos del Chapo a mediados de agosto pasado en un restaurante de Puerto Vallarta, estado de Jalisco, liberados luego a cambio de una cuantiosa suma de dinero. Los casos de mujeres al mando de organizaciones criminales en México no abundan y el más conocido es el de Sandra Avila Beltrán, la llamada «Reina del Pacífico», liberada en febrero del 2015, al revocar un juez su sentencia de 5 años de prisión por «lavado de dinero», tras ser detenida en 2007.

Se dice que Avila Beltrán, sobre quien se tejieron algunos mitos, es sobrina del capo histórico Miguel Angel Félix Gallardo, alias «El Padrino», aunque ella lo negó, pero sí inspiró la novela «La Reina del Sur», del escritor español Arturo Pérez-Reverte.

El libro luego se convirtió en una exitosa serie televisiva producida por la cadena estadounidense en español Telemundo.

En realidad, la mujer no estuvo realmente involucrada en la dirección de una organización criminal, sino sólo vinculada a algunos personajes de la mafia como «El Chapo» Guzmán y su socio Ismael «El Mayo» Zambada y a algunos capos colombianos.

En cambio, otra mujer menos mediática pero que sí tuvo un papel protagónico en una organización criminal fue Enedina Arellano, que se hizo cargo de la operación financiera del cártel de los Arellano Félix cuando algunos de sus hermanos murieron o fueron encarcelados. (ANSA).