miércoles, abril 17, 2024

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OPINIÓN: Un laberinto que empieza con B

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Por Rodrigo Conti, Director de Medios del Grupo Crónica

Si todos pensaran como Gerónimo Venegas, la realidad se permitiría recreos y el poder político tendría derecho a vacaciones… El secretario general de Uatre salió ayer a encender alarmas a plazo. “Se termina el Mundial y vamos a un paro nacional. No lo hemos hecho todavía justamente porque está el Mundial”, insistió el “Momo”.

Pero esa visión -que muchos políticos, empresarios y sindicales comparten- no aplica al universo judicial. Es que la fiebre futbolera no ha logrado darle tregua al Gobierno, que en el tramo final de su gestión se enfrenta a un complejo doble frente. La realidad adversa de los casos Boudou y de los fondos buitre ha generado una especie de laberinto cuya salida requerirá mucho más que astucia e iniciativa política.

En la Rosada eran conscientes de que ambos procesos podían derivar donde finalmente están hoy. Sin embargo, el procesamiento del vicepresidente por la causa Ciccone y las negativas del juez de Nueva York Thomas Griesa a la posición argentina ante el reclamo internacional de los holdouts, se adelantaron más de lo previsto. Y si bien estos frentes no son nuevos, el viernes pasado detonaron las peores luces de alarma.

Primero fue la decisión del juez Griesa de frenar el pago de la Argentina a los bonistas que entraron a los canjes de 2005 y 2010. Ordenó que continúe la negociación con los buitres y le exigió al Banco de Nueva York, custodio de esos fondos, que se los devuelva al país. Enseguida el ministerio de Economía acusó al magistrado y tildó de “insólita” la decisión.

Cerca de la medianoche y sin dar lugar al pedido de Boudou de ampliar su declaración indagatoria, el juez Ariel Lijo firmó el procesamiento del vice por los delitos de cohecho pasivo y negociaciones incompatibles con su función en el caso Ciccone. La decisión judicial, inédita en la historia argentina, no tuvo respuesta política por parte del kirchnerismo.

Si bien no es la primera vez que el Gobierno enfrenta un escenario enrevesado, esta vez lo hace en de cara al fin del mandato, con todo lo que eso representa. En Balcarce 50 evalúan las diferentes alternativas para descifrar posibles soluciones…

En el caso de la deuda con los holdouts, la Argentina apostará al rol clave del negociador Daniel Pollack, designado por Griesa y experto en el tema. Además, buscará que los bonistas que sí ingresaron al canje y que hoy no cobrarán intereses como estaba previsto, producto de la decisión del juez, vayan legalmente contra el propio magistrado y contra el banco de Nueva York.

Distinto es el caso de Boudou, cuya batalla tiene un plano judicial y otro absolutamente político. Y aunque aún no se sabe cuáles son los pasos que dará el Gobierno, voces del propio oficialismo han confiado que no “parece razonable que el vice pida licencia o renuncie porque sería validar todo el proceso judicial”. El argumento será el conocido. Mauricio Macri sigue al frente de su gobierno en la Ciudad pese a estar procesado. La oposición pide el juicio político, pero no tiene votos suficientes para lograrlo. Y aunque en el kirchnerismo admiten costo político, aseguran que el juzgamiento público ya pegó todo lo que podía… Las causas de Boudou y de los Buitres impidieron que el Mundial le diera un respiro al Gobierno.