jueves, abril 25, 2024

Internacionales

Posibilidad de vida en Marte

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El rover Perseverance de la NASA halló rocas en la superficie de Marte que contienen moléculas orgánicas y que, según los expertos, podrían ser «una posible forma de vida».

Efectivamente, contienen carbono, hidrógeno y oxígeno, las primeras rocas marcianas ricas en moléculas orgánicas.

Son cuatro y forman parte de las 12 halladas por el rover Perseverance de la NASA en el último año y destinadas a ser traídas a la Tierra por el futuro programa Mars Sample Return (MSR), de la NASA y la Agencia Espacial Europea (ESA).

«Ahora sabemos que el rover está en el lugar correcto», dijo el administrador para la Ciencia de la NASA, Thomas Zurbuchen, en una conferencia de prensa organizada por la agencia espacial estadounidense y transmitida en vivo de modo online.

La fuerte sospecha es que pueden ser indicadores de formas de vida que existieron en el pasado en Marte, pero por el momento no hay elementos para poder afirmar eso, porque tales moléculas también pueden ser el resultado de procesos químicos que no involucran lo vital.

Sin embargo no son las primeras moléculas orgánicas descubiertas en el planeta rojo: ya en 2013 y luego en 2018 otro rover de la NASA, Curiosity, había descubierto moléculas en el sonido marciano que contenían elementos «comúnmente asociados con la vida», «pero que pueden ser asociadas incluso a procesos no biológicos», como dijeron en su momento los líderes de la misión.

Las últimas cuatro rocas recogidas por Perseverance a partir del pasado 7 de julio son sedimentarias, distintas de las ígneas que empezaron a acumularse en otro punto del cráter Jezero hace aproximadamente un año.

Ése es uno de los lugares más sugestivos de Marte para investigar la vida pasada porque hace unos tres mil quinientos millones de años albergaba un gran lago en el que desembocaba un río.

Ahí llegó Perseverance en febrero de 2021.

La primera roca que recogió el rover se llama Rochette, y como las otras siete son de tipo ígneo, es decir, se produjo tras la cristalización del magma.

Las últimas cuatro, recolectadas en el área del antiguo delta del río, son en cambio parte de la segunda parte de la campaña de recolección de muestras y contienen moléculas orgánicas.

No se trata de moléculas biológicas, dijeron los expertos del Laboratorio de Propulsión a Chorro (Jpl) de la NASA, responsable de la actividad del rover.

Las rocas incluyen principalmente carbono, hidrógeno y oxígeno, pero también nitrógeno, fósforo y azufre: las moléculas de ese tipo pueden ser producidas por procesos químicos que no implican la presencia de vida.

Para analizarlas se involucró al instrumento Sherloc, equipado con la cámara Watson, y el grupo de investigación encargado de estudiar los datos son italianos que trabajan para el Observatorio Arcetri del Instituto Nacional de Astrofísica (INAF).

Es casi seguro que la respuesta sobre la naturaleza de estas moléculas solo estará disponible cuando las rocas lleguen a la Tierra gracias al relevo de la misión MSR, que según Lori Glaze, directora de la división de ciencias planetarias de la NASA, podría comenzar entre 2027 y 2028, mientras que la primera las muestras podrían llegar a nuestro planeta en 2033.

Entretanto, afirmó Glaze, habrá que resolver muchos problemas, incluido encontrar un sitio seguro en el que aterrizar los vehículos del programa MSR. (ANSA).