Llevar a la mesa pescados y frutos de mar más de dos veces por semana puede ayudar a volver más «vivaz» la vida íntima de las parejas y también favorecer la fertilidad, según un estudio científico.
La investigación involucró a 500 parejas, entre las cuales las que consumieron más pescado tuvieron actividad sexual más frecuente y pudieron concebir más rápidamente.
Los resultados fueron publicados en la revista Journal of Clinical Endocrinology & Metabolism, firmados por epidemiólogos de la Harvard TH Chan School of Public Health.
Las parejas, que tenían planificado un embarazo, llenaron cuestionarios alimentarios y fueron seguidas durante un año. De allí surgió que el 92% de las parejas que solían consumir productos ícticos más de dos veces por semana logró concebir un bebé, mientras que entre los que no lo hacía solamente el 79% lo consiguió.
Además, este consumo favoreció un aumento de la actividad sexual en la pareja, lo que no basta para explicar el mayor éxito en la procreación, pues probablemente el pescado también tiene un efecto ulterior sobre la propia fertilidad.
«Nuestros resultados muestran la importancia del hecho de que no solo la dieta de ellas sino también las de sus parejas pudo tener un rol en el tiempo de la concepción, y sugieren que ambos deberían consumir más productos ícticos para maximizar los beneficios sobre la fertilidad», afirmó Audrey Gaskins, responsable del trabajo científico. (ANSA).
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