Lo adelantó, el jefe de Gabinete, quien dijo que «en principio el veto será total» y aseguró que «es de muy mala factura”. Aníbal Fernández calificó a la norma como «pésima» y consideró que es de «imposible cumplimiento». La ley elimina los derechos de importación a los productores de la Provincia.
«No quiero hacer calificaciones de lo sucedido en el Congreso. Sabrán cuáles son las razones y por qué se llegó al punto en que se llegó, pero tengo muy en claro que la norma es de muy mala factura y nos obliga a nosotros a tener que vetarla», confirmó esta mañana el jefe de Gabinete, en declaraciones a radio Continental.
Al ser consultado sobre si el veto es parcial -es decir, al artículo 4 cuestionado-, el jefe de Gabinete respondió: «no, es veto total» y agregó: «en principio, sí (se veta toda la ley), pero es un tema para análisis del día de hoy y se los cuento cuando lo tengamos terminado».
El jefe de los ministros agregó que el proyecto «es pésimo, de muy mala factura y deja huecos por los cuatro costados, y en ninguna condición uno puede aceptar un proyecto de esta característica que sabe como empieza y nunca como termina».
El Senado convirtió el jueves pasado en ley el proyecto que declaró la emergencia agropecuaria por sequía.
En sus declaraciones de esta mañana, Fernández dijo que no es él «quien tiene que evaluar lo que pasó en el Congreso porque es otro poder de la República», y negó que haya retado a los jefes de los bloques oficialistas en ambas cámaras, Miguel Angel Pichetto y Agustín Rossi por el tema.
«Yo no reto a nadie, no tolero que nadie me rete a mí, no soy quien para hacer semejante cosa», dijo.
Luego, Fernández ofreció una explicación técnica acerca de los motivos por los cuales el artículo 4 de la ley, que prevé una rebaja de hasta el 50 por ciento en los derechos de exportación por 180 días, es de «imposible cumplimiento».
«Se supone que el objetivo es beneficiar a los productores a la hora de comercializar su producción, pero a esta altura del año los productos agropecuarios ya comercializaron fundamentalmente el trigo. Ergo el precio pagado por los exportadores ya incluyó el descuento de los derechos de exportación. Ya está vendido y ya esta pagado con descuento», precisó.
En ese sentido, el funcionario dijo que el proyecto entonces «lo único que haría sería beneficiar o a los acopiadores o a los exportadores que disponen de ese producto», ya que «de ese modo no se está asistiendo a los productores que padecen la sequía, se les está otorgando un beneficio para la próxima comercialización de la próxima cosecha».
Fernández planteó entonces los siguientes cuestionamientos: «¿Cómo harían para identificar al producto afectado por la sequía?, ¿Cómo se determinaría la procedencia o la trazabilidad de los granos y nada menos que en 30 días como prevé la ley?».
Asimismo indicó que «podría suceder que la producción fuera para el mercado interno por lo cual no tendría rebaja de derecho de exportación, y podría utilizarse la documentación respaldatoria de esa compra para exportar granos de otro origen».
Según el jefe de ministros, «esta maniobra sería de muy difícil detección, con lo cual el proyecto es pésimo y nos obliga a nosotros a tener que vetarlo».
Por último, ante una consulta, dijo que no habló el tema con el gobernador bonaerense Daniel Scioli. «Es una norma que impacta mal y tiene imposible cumplimiento. Hay que actuar y no preguntar a los otros que opinión tienen», concluyó. (TELAM)