Los científicos emplean simulaciones numéricas para analizar el clima pasado y presente y conjeturar cuáles podrían ser los diferentes escenarios, a los que la humanidad podría tener que enfrentarse en el futuro.
Cinco puntos clave
Tanto los modelos climáticos como los datos que se emplean para realizar estos estudios son aportados por científicos de todo el mundo. Las conclusiones de estos estudios son vitales, para conocer los factores que influyen en el cambio climático actual y cómo proceder para mitigar sus consecuencias.
La mayoría de los simuladores prevén que, para el año 2100 el planeta experimentará un calentamiento mucho mayor del que estimaron las versiones anteriores. En particular son mucho menos optimistas que las del 2012, en cuanto a los escenarios que dependen de las emisiones de gases de efecto invernadero.
Más calentamiento
El planeta podría experimentar un calentamiento que los científicos calculan podría rondar entre los 6 y los 7°C para finales de siglo, si se los compara con las cifras de la era preindustrial. Este escenario se hace más más pesimista, si se calcula según el actual contexto socioeconómico y las concentraciones de gases de efecto invernadero
Ello se debe a que las cifras indican que seguirá habiendo un crecimiento económico sostenido, pero que por muchos años seguirá dependiendo de los combustibles fósiles. Ello deriva en una predicción de un mayor calentamiento del planeta, que, si bien es más precisa que las anteriores, por ahora sigue incluyendo muchas incertidumbres, que deben evaluarse teniendo en cuenta un gran número de factores.
Políticas definitorias
La temperatura de la Tierra a finales de este siglo dependerá en gran medida, de las políticas climáticas que los gobiernos del mundo implementen en la actualidad y en un futuro muy cercano. Hasta el 2040 el aumento de las temperaturas será sostenido, pero la evolución global del cambio climático puede variar notablemente, según las acciones políticas que se lleven a cabo, al menos un par de decenas de años antes.
Mitigar es prioritario
Para alcanzar el objetivo de calentamiento global de 2°C, al que se comprometieron los firmantes del Acuerdo de París (y del resto de las Cumbres climáticas posteriores) se requiere un esfuerzo de mitigación significativo y global. Según los simuladores, el escenario más optimista predice que, casi con seguridad, se alcanzará esta cifra a mediados de siglo.
Para impedir que se disparen las temperaturas será necesaria una reducción inmediata de las emisiones de gases y alcanzar la neutralidad de carbono a escala global en 2060 como máximo, así como comprometerse a capturar un mínimo de 12 mil millones de toneladas de CO2 anuales, comenzando lo antes posible.
Adiós al hielo
El hielo marino del Ártico está retrocediendo rápidamente y los modelos vaticinan que esta tendencia continuará en el futuro. Si no se disminuye drásticamente la cantidad de gases que incrementan el cambio climático, el hielo marino del Ártico probablemente se derretirá por completo al término de cada verano y el escenario más pesimista prevé su completa desaparición, para casi el final del siglo.
Hola al calor
Veranos como el del 2003, que se caracterizó por olas de calor de gran magnitud y duración, podrían ser la tónica común a partir de la década de 2050. Los modelos simulan olas de calor cada vez más intensas y frecuentes en Europa (y el resto del mundo), en línea con los cambios observados en las últimas décadas.
Esta es una tendencia que continuará durante los próximos 20 años, independientemente del escenario considerado, pero que podrían cambiar a partir de mediados de siglo, dependiendo de factores como, los niveles de contaminación y de emisión de gases, los sistemas de consumo y un largo etc.
Fuente: Energías Renovables