Este 1 de noviembre es el Día mundial del Veganismo, la celebración de una filosofía de la alimentación y de la vida que día a día gana más adeptos, quienes dedican su vida a cuidarse a sí mismos sin hacer daño a otras especies.
Orígenes del veganismo
En el Día Mundial del Vegano se honra a todos aquellos que rechazan consumir de forma directa o indirecta, cualquier tipo de productos que tengan origen animal, ya sean alimentos, ropa, complementos, calzado, artículos que estén relacionados con el ocio, el entretenimiento y la recreación, cosméticos, limpiadores y un largo etc.
El veganismo se remonta a la década de 1940, cuando Donald Watson, un profesor de carpintería acuñó este término en 1944 y lo difundió mediante un comunicado de prensa.
The Vegan News nació con el objetivo de ser un periódico pionero, que difundiera los que luego fueron los principios y pilares del Veganismo. Watson se crió en el seno de una familia consumidora de carne, que vivían en South Yorkshire (Inglaterra).
Su tío trabajaba en una granja y fue allí donde tuvo la oportunidad de estar en contacto con las matanzas de animales con el fin de consumir su carne y eso lo marcó de por vida.
A los 13 años era vegetariano y cuando se hizo mayor acabó fundando la Sociedad Vegana, que da origen a la celebración actual.
Los principios del veganismo
Esta es mucho más que una forma distinta de alimentarse, porque ser vegano implica comprometerse seriamente con una filosofía de vida completamente diferente, a la que tiene la gran mayoría del resto del mundo.
Sus tres principios son: la ética, la dieta y el medio ambiente.
Ética
La idea de los veganos es ser éticos con el resto de los animales, sin que ninguna de nuestras acciones ya sean directas o indirectas puedan implicar el más mínimo maltrato a unos de ellos.
Dieta
El consumo excesivo de carne es perjudicial para la salud humana, por lo que los veganos se abstienen completamente de consumirla y tampoco aceptan alimentarse de ninguno de sus subproductos.
Medio ambiente
La producción de alimentos vegetales, especialmente si es ecológica, no solo es muchísimo menos contaminante que la producción de carne, sino que su impacto puede ser incluso beneficioso para mitigar los efectos del cambio climático.
Las principales ‘pegas’ que tiene el veganismo proviene del ámbito económico, puesto que todos los productos que cuentan con la certificación vegano o ‘vegan’ suelen tener costos altos.
Por otra parte, aún hay algunos alimentos que proveen al ser humano de ciertas sustancias y componentes vitales, que no tienen sustitutos vegetales.
Fuente: Energías Renovables