Se trata de la politóloga Claudia Guebel, quien radicó su denuncia ayer. El senador ocupa banca por La Pampa desde el año 2003.
Por sorteo, la denuncia le cayó al juzgado federal n° 5 y a la fiscalía federal n°6.
En la denuncia, contó que «el Senador estipuló que mis funciones fueran desempañadas desde mi domicilio.
Nunca tuve un trato de amistad ni de confianza, sí de respeto por su función. Ilusamente pensé que trabajar junto a él era el lugar indicado para mí.
Para mí era un desafío profesional por mi formación académica. El senador nunca leyó ninguno de mis informes».
«Al mes de empezar a trabajar, comencé a recibir mensajes de WhatsApp a mi celular que conservo actualmente”, continuó y detalló:
“En esos mensajes me decía ‘¿Dónde estás?’ ‘¿Dónde vivís?’ ‘Voy a estar por allá; me doy una vuelta’ ‘Preparate, que voy a tu casa’. Me enviaba videos alusivos al sexo».
Guebel aseguró que los mensajes los recibía «constantemente, varias veces por semana».
«Una vez que nos encontramos solos directamente me tocó los pechos y me preguntó cuándo íbamos a tomar un café, me dijo que aguardara su llamado que en cualquier momento nos veíamos”.