El Gobernador afirmó que se trata de un problema que “no se resuelve con soluciones simplistas ni con discursos de campaña, sino con políticas efectivas y un Estado presente”.
En la apertura de sesiones ordinarias en la Legislatura bonaerense, el gobernador Axel Kicillof cuestionó “un hecho sin antecedentes que no podemos pasar por alto” en alusión al pedido que Javier Milei le hizo por redes sociales para que renuncie.
“Parece irreal, pero el Presidente de la Nación amenazó con intervenir la Provincia y pretendió echar al Gobernador por redes sociales. Tal como ocurrió con la criptomoneda, ahora dice que no quiso decir eso. No se puede ser tan impune, cínico e irresponsable”, indicó.
En ese marco, advirtió que “así como un Presidente no puede avalar una estafa financiera de escala internacional, tampoco puede usar el mandato que le dio la democracia para atentar contra ella. Desde acá le quiero recordar al presidente que con la democracia y con el federalismo no se juega”.
Kicillof aseguró: “No voy a permitir que el destino de los bonaerenses quede librado a la improvisación, la prepotencia o el resentimiento de un Presidente que no respeta la democracia” y detalló el desastre que las políticas nacionales están provocando.
En tal sentido, puntualizó: “El sector privado se está reduciendo: se destruyeron 12.600 empresas, mientras que el gran ganador es el sector especulativo.
Muchos perdedores y pocos ganadores dan como resultado una mayor concentración de la riqueza en pocas manos, más desigualdad, menos oportunidades y menos libertad para las mayorías. Este modelo resulta injusto, inestable y frágil”.
El mandatario provincial lamentó que “en la República de Milei los únicos privilegiados son los millonarios y estafadores” y subrayó que “la deuda del gobierno nacional con la Provincia asciende a $9,4 billones, sin considerar el impacto de la recesión en la recaudación: por estos fondos realizamos siete denuncias ante la Corte Suprema de la Nación. La justicia le tiene que poner un límite a este saqueo ilegal”.
Kicillof manifestó que “la deserción del gobierno nacional no es solo una cuestión económica o administrativa, es también un proyecto de desintegración nacional.
No es un descuido ni un error: es un plan. Milei no solo busca achicar el Estado, quiere desintegrarlo, quiere desmantelar la comunidad, quiere dividirnos para debilitarnos. Y eso es una estafa al pueblo, a la patria y a la Constitución”.
En cuanto a su gestión, el Gobernador recalcó que la Provincia “actúa como escudo para proteger derechos agredidos y como red para atenuar el daño y sostener, en las medida de nuestras posibilidades, el tejido social y productivo. En cada tema demostramos con hechos que sí hay una alternativa a la motosierra y al ajuste”.
“A pesar del ajuste de Nación, estuvimos cuando otras provincias nos necesitaron. Hemos coordinado acciones de respuesta rápida frente a situaciones de emergencia en Río Negro, Chubut y Córdoba.
Junto a la provincia de Santa Fe y, en el marco de la lucha contra el narcotráfico, reforzamos la presencia operativa en Rosario destinando 80 móviles a la ciudad. Tengo la carta de la Ministra en la que los solicita y mi respuesta fue sí, por supuesto”, subrayó el Gobernador.
Al describir los ejes de la gestión para este año, Kicillof anunció que “destinaremos $170.000 millones para fortalecer la seguridad y la protección de los bonaerenses.
Sumaremos este año 800 nuevos patrulleros para la Policía; crearemos un Fondo Municipal de $70.000 millones para los municipios de más de 70.000 habitantes; y construiremos 15 bases nuevas en los barrios para aumentar nuestra capacidad de protección, vigilancia, prevención e integración comunitaria”.
Además, “presentaremos un paquete de reformas legales para aumentar las penas por tenencia ilegal de armas y agilizar los allanamientos en flagrancia para atacar con rapidez los búnkeres de droga”, adelantó.
En relación a ese tema, agregó que “la seguridad no se resuelve con soluciones simplistas ni con discursos de campaña, sino con políticas efectivas y con un Estado presente.
Nuestra respuesta es clara: inversión en seguridad, política de seguridad más seria y profesional, que se aplique de manera inflexible la ley, pero también garantizar mayor justicia social y más oportunidades de futuro para los jóvenes”.
FUENTE: Radio Provincia