lunes, mayo 20, 2024

Generales, Nacionales

Primero Sergio Massa, últimos los medios dominantes

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Las operaciones mediáticas fueron aún peores que las encuestas. LN+, TN y otros, son la verdadera vergüenza nacional. Se disfrazarán de libertarios en 3,2,1

Más que Bullrich, más que Macri, más que la expectativas de Milei de ganar y arrasar en primera vuelta, quienes mayor mea culpa deberían realizar, aún por encima de los encuestadores (que además suelen ser sus empleados), son los medios dominantes de comunicación argentinos, que ya demostraron haber licuado su poder de convencimiento por la pérdida de credibilidad al «operar con mala praxis» a favor de quien, a la postre, resultó tercera cómoda a 13 puntos de Sergio Massa el candidato más votado en la primera vuelta.

Ni los editoriales de Jonatan Viale, ni las sensuales posturas rebeldes de Viviana Canosa, ni las «fraudulentas investigaciones» de Luis Majul, tampoco las filtraciones entre sábanas de Guadalupe Vázquez pudieron torcer del todo la voluntad del pueblo, a pesar de descalificaciones, persecuciones televisivas y judiciales, atentados olvidados, o suicidos reflotados recurrentemente para sacar rédito ante cierta opinión pública crédula y permeable a sus apotegmas apocalípticos.

La debacle en la credibilidad de los grandes grupos mediáticos fue absolutamente lacerada por la lija de la mentira, los montajes y las fake news permanentes. «Se puede engañar a muchos poco tiempo o a pocos durante largos periodos». Pero es imposible mantener en una mentira repetida como un mantra a millones de ciudadanos desde 2008 hasta el presente.

Ni con una inflación galopante, con errores propios no forzados, con el candidato principal del gobierno involucrado en el área más álgida, como es la economía, consiguieron torcer del todo los destinos de una elección, a propri condenada por ellos a constituirse en la desaparición del peronismo.

La realidad les dio una bofetada shockeante y nockeante justamente a quienes tienen por tarea contar esa realidad, poniendo en tela de juicio su mismísima razón de ser. Porque si te pagan por narrarla, y construís una verdad paralela que la gente no compra, fallaste como periodista y comunicador, pero también como operador político.

No caben dudas que en el próximo mes los mismos quienes defenestraron al candidato rupturista de la motosierra se abrazaran a él como la «Esperanza Blanca». Olvidarán la venta de bebés y de órganos, el odio al Papa y al Vaticano, las promesas de terminar con la Justicia Social, la eliminación de «la casta», para comenzar a tender puentes que quieran seguir machacando en la necesidad de «exterminar al Kirchnerismo» como la bandera más importante de campaña.

Lo único que a los dueños de los grandes medios les importa, mucho más allá de la pobreza, la corrupción o la inseguridad, ítems que solo le son funcionales cuando gobiernan quienes entronizan políticas que les son contrarias a sus intereses propios, son ellos mismos, y a la clase dominante económica y judicial que representan.

Asistiremos en los próximos días a la nueva metamorfosis de los grandes comunicadores que venderán a Javier Milei como un casto, inocente, estoico y quijotesco héroe cuya tarea es batir y vencer a las «fuerzas del maligno» kirchnerismo, con el espíritu de David enfrentando a Goliat.

Infocielo