El Super Bowl, se sabe, es el evento deportivo más importante en Estados Unidos y por ende atrae a muchos interesados en invertir su dinero para patrocinar sus productos.
Pero la quincuagésimo sexta edición que animarán el domingo 13 de febrero los Cincinnati Bengals y Los Angeles Rams en el SoFi Stadium de Inglewood, California, parece llamada a ser la más cara de la historia.
Y no estamos hablando de los millones que deben desembolsar los anunciantes por algunos segundos en ese escenario privilegiado, sino de los precios de las entradas, que parecen haberse disparado hasta las nubes.
Según los entendidos, la combinación del evento deportivo más esperado y el hecho de que la gran final de la NFL se dispute en la segunda mayor área metropolitana del país generó un mix explosivo.
Para poder presenciar el duelo en vivo se necesitan al menos mil dólares por un puesto en el último anillo del estadio, pero el acceso promedio ronda los 10237 dólares, según el sitio SeatGeek, el doble que hace un año.
Una locura, pensarán algunos, antes de enterarse que los valores de las entradas VIP oscilan en los 72 mil dólares.
«Esto es Los Angeles, la capital mundial del entretenimiento, donde los precios de todo están por las nubes. Es la tormenta perfecta», resumió Adam Budelli, vocero de StubHub, en diálogo con la CNN.
Para poner en contexto la situación, hay que destacar que este Super Bowl es el primero que se celebrará en Los Angeles en 30 años, lo cual al menos le evita los gastos de traslado y alojamiento a los aficionados de la franquicia local.
«La cercanía de las sedes de ambos equipos siempre es un factor que incide en el precio», destaca Budelli.
Chris Leyden, director de estrategia para los consumidores de SeatGeek, agrega otro detalle: Junto a los fanáticos neoyorquinos, los de Los Angeles siempre fueron los más enfervorizados a la hora de conseguir un boleto para el Super Bowl.
Desde el martes por la tarde, las entradas expendidas por SeatGeek se comercian a 5218 dólares, más una tasa por comisión que eleva el valor total a unos 7 mil dólares.
El boleto más accesible de Ticketmaster, incluida la comisión claro, ronda los 6746 dólares hasta un máximo de 72750 dólares por una ubicación en el sector VIP ubicado a pocos metros del campo de juego. (ANSA).
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