viernes, abril 19, 2024

Internacionales

BRASIL: Moro y unos cuantos más espiados

Sharing is caring!

Cuatro supuestos piratas cibernéticos continuaban detenidos hoy en Brasilia luego de horas de interrogatorios con investigadores de la Policía Federal, para quienes los sospechosos invadieron los teléfonos de «cientos» de autoridades y del ministro Sergio Moro, que planeaba reunirse con el presidente Jair Bolsonaro.

La investigación se encuentra bajo secreto de sumario, pero, según trascendidos, los arrestados habrían violado la privacidad de «cientos» de funcionarios, políticos y periodistas, y no sólo la de Moro, informaron el diario O Globo y otros medios.

El principal objetivo de los «hackers» fue Moro, hoy ministro de Justicia y Seguridad Pública, que entre marzo 2014 y fines de 2018 comandó la causa anticorrupción Lava Jato.

«Felicitaciones a la Policía Federal por la investigación del grupo de hackers así como al Ministerio Público Federal y la Justicia Federal», conmemoró el funcionario.

Estaba previsto que el presidente Bolsonaro reciba este miércoles a Moro en el Palacio del Planalto para analizar la marcha de la investigación.

Fuentes de la Policía Federal dejaron trascender que a partir de las informaciones obtenidas en las cuentas bancarias de algunos de los detenidos el próximo paso es saber si éstos fueron contratados y que intención política movió a los financistas.

La orden de arresto fue impartida por el juez federal de primera instancia de Brasilia, Vallisney de Souza.

Según el magistrado hay «fuertes indicios de que los investigados integran una asociación ilícita y que se unieron para violar el sigilo telefónico de varias autoridades a través del aplicativo Telegram», señala el magistrado.

Los sospechosos son el discjockey Gustavo Henrique Elias Santos y su mujer, Suelen Priscila de Oliveria, Danilo Cristiano Marques y Walter Delgatti Neto.

El Operativo «Spoofing» iniciado el martes por la mañana por la Policía Federal derivó en las detenciones realizadas en las ciudades de San Pablo, Araraquara y Ribeirao Preto, estos dos últimos en el interior del estado de San Pablo.

El primer interrogatorio ocurrió entre las 19 y 22 horas del miércoles (22 y 1 GMT) en la Superintendenciia de la Policía Federal de Brasilia.

A principios de junio el ministro Moro denunció haber tenido su celular invadido y pocos días después el sitio The Intercept publicó los primeros artículos sobre eventuales irregularidades en la causa Lava Jato.

El lunes por la noche el ministro de Economía, Paulo Guedes, también informó de una invasión a su teléfono celular y poco antes igual denuncia fue realizada por la diputada Joyce Hasselmann, líder del bloque oficialista.

Los cuatro presos también habrían invadido el celular del jefe del equipo de los procuradores federales de la causa Lava Jato, Deltan Dallagnol.

The Intercept, editado por Glenn Greenwald, publicó la trascripción de conversaciones entre Moro y Dallagnol, a través de la aplicación Telegram, en las que habrían acordado maniobras irregulares para forzar pruebas y coordinar procedimientos en Lava Jato.

Este miércoles Moro se refirió indirectamente al sitio al cuestionar a «aquellos que divulgan supuestos mensajes obtenidos a través de crímenes».

Entre tanto el periodista estadounidense Glenn Greenwald, radicado en Brasil, ironizó los arrestos al postear: «Qué interesante, la Policía Federal encontró rápidamente un grupo de hackers, pero no logró encontrar a Fabricio Queiroz».

De esa manera el periodista refirió al supuesto desgano policial en buscar Queiroz, un amigo de la familia del presidente Bolsonaro, sospechoso de lavado de dinero. (ANSA).