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Por Horacio Piemonte

El proyecto del nuevo Código de Faltas enviado por el Ejecutivo Provincial, no tiene nada de nuevo. Es una de las propuestas más reaccionarias que hemos conocido de la dictadura a la fecha, y recoge como tal una concepción represiva y fascista que pone en riesgo a la población toda, criminalizando la pobreza y la exclusión, y reprimiendo la protesta social.

Mediante este Código de Faltas, se pretende sancionar mediante la multa y el arresto a cualquier ciudadano mayor o menor de edad, que por ejemplo se encuentre durmiendo en la vía pública.  El no tener techo y estar obligados a vivir forzosamente en la calle, para el nuevo Código de Faltas,  no es una violación al derecho a tener una vivienda digna, sino que se convierte en una trasgresión a este proyectado código.

Se le otorga a la policía bonaerense un poder absoluto para “proceder de oficio” en este tipo de situaciones, fuera de todas las garantías constitucionales, y en clara violación a los derechos humanos. La historia reciente nos ilustra cómo la policía bonaerense ha avasallado muchas veces nuestra condición humana.

Es obvio que la intención del Gobernador Scioli es enviar un mensaje a la clase media, tratando hacerle creer que medidas de este tipo van a ayudar a mejorar la seguridad. Apelando a que el temor que muchas veces nos invade de solo caminar por la calle nos lleve a apoyar esta aberración política.

La desorientación del gobierno provincial en la materia, el fracaso de sus medidas, y los hechos de la realidad que todos los días nos muestran el descontrol, el caos, y el profundo dolor de personas que ven perder a sus familiares queridos o son víctimas de situaciones angustiantes, llevan al gobierno a proponer este tipo de disparates.

Cómo puede pretender el Gobernador que nuestra sociedad no recuerde que esta es la reedición del discurso dictatorial, que fue además la puerta de entrada a la época más triste y sangrienta de nuestro país: “Encerremos a los pobres, ocultémoslos, y sancionemos la protesta social”, así también comenzó entonces.

Cómo piensa lograr un apoyo mayoritario a esta propuesta, si la sociedad cada vez tiene más claro que si no hay respuesta a la exclusión social es imposible frenar la inseguridad. Debería explicar el Gobernador por qué ha subejecutado todas las partidas de programas sociales ahondando en la provincia la gravedad de la situación de la niñez, y el crecimiento de la pobreza y la marginalidad.

Pretende el gobernador que mientras las bandas de narcotraficantes se pasean por nuestra Provincia, haciendo estragos en nuestros chicos, vamos a creernos que combatiremos la inseguridad metiendo presos limpiavidrios, cuidacoches o mendigos. Es cierto que muchas veces la sociedad puede confundirse en reconocer la salida pero no puede el gobernador tomarnos por idiotas.

Sr. Gobernador, es hora de que deje de mostrar solo voluntad de hacer las cosas, usted no es un comentarista de la situación, o alguien que está para darle ánimo a la población. No puede proponernos más barbaridades para aparentar que hace algo. Usted está allí para resolver los graves problemas que nos aquejan. Y también para reconocer si no sabe o no puede hacerlo. Tal vez sería el primer paso de encontrar las soluciones.

Dip. Coalición Cívica-ARI