martes, abril 16, 2024

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NECOCHEA: La bisnieta de Andrés Ferreyra estuvo en la ciudad

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«Aunque parezca increíble, solo con aire podemos experimentar los beneficios de encontrar paz interior, buena salud y una mente libre de estrés», dijo Celina Ferreyra, instructora del curso, Fase 1, que se está realizando en nuestra ciudad.

El curso de respiración que impulsa la Fundación Internacional El Arte de Vivir, se desarrolló con muy buen éxito en las instalaciones del Jardín de Infantes Nº 914, de la villa balnearia.

Para la encargada de convocar a la gente, la profesora de yoga Marisa Liarte, no es novedad el crecimiento de esta disciplina porque puede observar el mayor interés que ha despertado en nuestra comunidad. La publicidad del «boca a boca» ha sido, sin dudas, muy efectiva.

«Es increíble como ha crecido en Argentina», expresó la instructora, una mujer que destila tranquilidad por dónde se la mire.

Celina Ferreyra, además de ser instructora de El Arte de Vivir, es bisnieta de Andrés Ferreyra, aquel prócer de nuestra ciudad, cuyo nombre lleva la Biblioteca Pública que tiene sus instalaciones en el Centro Cultura Necochea.

«Escuché mucho hablar de esta ciudad a mi padre», lugar en el que permaneció recluido por persecución política a su abuelo. «Se que mi padre estudió algunos años en Necochea», recordó la entrevistada.

Poseedora de una gran paz interior, Celina, esta mujer de ojos color del cielo, madre de tres hijos, es profesora de filosofía, le encanta la pintura, es traductora y, además, tiene tiempo para fabricar barquitos adentro de botellas.

«Con estos cursos, los participantes adquieren una herramienta muy importante para mejorar la calidad de vida, su salud mental y física, a través de técnicas sencillas y breves». En este sentido vale recordar que los pulmones son un filtro por el que se pueden eliminar un 80 por ciento de toxinas, empero, en general sólo se utiliza el 30 por ciento de la capacidad pulmonar.

«Los motivos del cambio son simples, en un cuerpo más oxigenado, los virus encuentran mayor dificultad en proliferar y con una mente saludable el sistema inmunológico se eleva», reflexionó.

El cambio de Celina

Seguramente nunca estuvo en los planes de Celina Ferreyra ser instructora de la más grande fundación internacional donde prima el voluntariado. Sin querer (¿?) se encontró involucrada en este movimiento que tiene por finalidad una mejor manera de vivir.

Uno de sus hijos, Santiago, es publicista. «A determinada edad comenzó a hacerse algunos planteos sobre la vida, a los que no encontraba respuesta. Uno de ellos tuvo que ver con su profesión porque decía, por ejemplo, cómo puedo hacer una publicidad de una marca determinada de cigarrillos si se que el tabaco hace mal a la salud».

Más adelante recordó que «un buen día apareció Santiago con la posibilidad de hacer un curso en El Arte de Vivir. Había leído algo y le había parecido interesante. Más adelante participó de otro curso, Fase II… la verdad que lo comencé a ver muy bien, feliz, pero a mí no me gustaba nada»

Ante la posibilidad de que su hijo haya sido capturado por alguna secta, o movimiento de fanáticos, comenzó a investigar para saber «en qué manos estaba Santiago».

Para entonces, Santiago -actualmente instructor- viajó a India, y se lo observaba cada vez más feliz.

En oportunidad de la primera visita de Sri Sri Ravi Shankar (creador de la fundación El Arte de Vivir), fui verlo. «Había una multitud. Ravi Shankar respondía a preguntas. Creí que no iba a poder preguntarle nada, pero me dio la oportunidad» precisamente cuando se dispuso a responder la última consulta. «¿Cuándo me van a devolver a mi hijo? ¿Cuándo volverá a ser normal?» fue mi interrogante. La gente estalló en risas y Shankar me respondió que los instructores deben volver a hacer su actividad cotidiana, en su ámbito».

Recuperada su tranquilidad, para entonces Celina, sin saberlo, ya estaba protagonizando un cambio en su vida. Realizó cursos, participó de congresos, y hoy es una de las tantas instructoras de El Arte de Vivir.