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DESPUÉS DE SU EXCURSIÓN FRUSTRADA ENTIERRAS ¨K¨

EL INTENDENTE MOLINA PARECE

VOLVER AL PAGO. SUPO QUE TODO LO QUE RELUCIÓ

NO ERA ORO Y PARECIA PAISANO AJENO EN OTRO SECTOR.

EL COMITÉ RADICAL VOLVIO A ATRAPARLO CON SUS

TENTÁCULOS FOLKLORICOS. PERICO AZCOITI Y SUS BOYS

GANARON LA BATALLA Y OBLIGARON AL INTENDENTE

A  INTENTAR  LA

REELECCIÓN Y A LA RENDICIÓN.  PARAFRASEANDO

A ALFONSIN, LA CASA ESTA EN ORDEN…? ESTA EN ORDEN

O ES SIMPLEMENTE UNA POSE DE OCASIÓN ?.

A Molina pareció de repente agarrarle un ataque de radicalismo, después de su  frustrada excursión por campos Kirchneristas acompañado de Roberto Porcaro y sus K, quienes aparecen ahora como kansados, de tanto transpirar la camiseta ajena y no poder tenerlo en el equipo a este huidizo hombre de la democracia radical.

Volvió al lugar que nunca debió haber dejado, no lo hizo por virtud sino por  necesidad, sabe que cuando no hay tortas hay que conformarse con pan. La noche del Comité Emiliano Abasolo lo esperaba con marcha partidaria, letra que últimamente no recordaba, choripan y presencia comiteril, con una escenografía bien armada donde cada uno cumpliría sus roles.

El gran acto  estaba planificado  con discurso estudiado pero con  miradas que hacían creer en un creativo momento improvisado con letras que emanaban del corazón militante, afuera arreciaba la baja  temperatura, adentro un frió interior porque todo no anda bien y en el bunker de enfrente a esa misma hora , la Concertación ¨gastonista¨ en su esplendor, y como una cachetada del destino dos dirigentes de la talla de José María Ferrer y Carlos Díaz, del mismo palo histórico pero con distintas visiones de la realidad, exultantes y felices discurseaban aplaudidos por la heterodoxia de Primero Necochea.

Molina volvió de las exageraciones ¨porcaristas¨  ofreciéndole un mundo mejor con visita turística incluida a la Rosada, prosiguiendo su ego del nacimiento ¨molinista¨ pero sabiendo que su lugar en el mundo como la película de Aristarain es la Unión Cívica Radical.

A la hora señalada vendría el ofrecimiento a la reelección, en el momento prefijado el ¨atrapado¨ radical  tomaría el micrófono  y daría el si en el altar del Abasolo. Aplausos, mirada desconfiada  en el jefe local Perico Azcoiti, quien por las dudas no usó la platea  preferencial, su lugar habitual en cualquier posicionamiento nochero, un presidente de comité, Pagliaro, quien tuvimos el gusto de conocer gracias a la magia de la TV y diarios locales que sacaron su primera foto dirigencial.

Sin embargo fiel a su estilo indeciso, ni siquiera cuando tuvo la oportunidad del aplauso sin medida, el intendente no pudo con su genio y se enmarañó nuevamente en la confusión.

Privilegió el Frente Vecinal como algo trascendente y de años de conformación, cuando cualquier  hijo de vecino sabe que es un Frente conformado por un puñado de buenos vecinos,  devenidos en socialistas para esta instancia y el partido Radical. Para decirlo sin vueltas, el Frente Vecinal es el Partido Radical dibujado para la ocasión. Para colmo el viejo y reconocido Partido Socialista más que en un Frente terminará en la justicia obligando a un puñado de afiliados de última hora (algunos funcionarios molinistas) a sentarse en una asamblea o más tarde en una interna, para determinar el camino a seguir.

EL DISCURSO CASI UN ANUNCIO DE DERROTA

Al escuchar el discurso anodino del intendente tengo la idea de estar asistiendo a la crónica de una derrota anunciada. Instando a la unidad radical, luego de haber sido General de la desunión con sus cambios permanentes y sus amagues de irse fuera de la cancha, retar correligionarios bajo el concepto “Hay que salir a la calle y volver a enamorar desde el radicalismo como en el 2003¨. En realidad la UCR  no enamoró demasiado en el 2003, más bien se separó de la clase media y resignó sus propios votos el partido que durante 20 años había gobernado la ciudad.

Expresó que vendrán por el municipio en forma descarnada. Casi un chico que tiene miedo de la noche y su tormenta, el intendente sabe que están subiendo las escaleras del municipio, y cada día que pasa es un escalón más que sube Gastón Guarracino, percibiendo también que el vecinalismo en serio, el de Oscar Pérez intendente recupera eslabones perdidos y cada suma de la ACT es un casillero menos para el ¨molinismo¨.

El intendente aceptó reelección y rendición. Todo por el mismo precio.

Se subió al convite de la candidatura y sacó la bandera blanca de rendición.

No esta demasiado convencido de esa candidatura pero no queda otra, el hombre es el y su circunstancia, tampoco es un hombre audaz, de esos que son hijos del destino y sabe que a pesar de proclamar nueva política se encuentra en la telaraña de siempre, esas que saben  tejer los que saben.

Terminó su  meta  primaveral de independencia política, duró lo que dura un sueño, era demasiado fácil para ser real. A pronto de andar llego la realidad.

Ahora vendrá lo tradicional, a explicarle al vecino lo que se hizo, lo que no se hizo y lo que no quiso que se hiciera por caprichos tontos de mentes adolescentes.

Tendrá que explicar por qué tomo una comuna sin deudas y estamos en un déficit de casi quince millones de pesos, si son necesarios 1700 empleados públicos en el estado, con 400 en la era ¨molinista¨, decirle al vecino que frente a la Terminal no se levantó un Polideportivo pero el estado hace una buena preservación de ratas y contaminación, explicar que el intendente no tiene nada que ver con la inseguridad  negándose a colocar  las cámaras de seguridad que fueron votadas unánimemente por el HCD ,como así una ley local de control de patovicas que duerme el sueño de los justos en algún escritorio de su despacho

Y que la falta de limpieza en la ciudad es culpa exclusiva del vecino. En la vueltita por Quequén hablarle de cara a la gente  sobre la contaminación ambiental y las fábricas ejemplos que fueron autorizadas por su administración, Caso Raiser…los autonomistas lo están esperando por promesas incumplidas y en cada pueblo del interior los ciudadanos aguardando poder votar delegados tal cual rezaba en su campaña del 2003.

Para volver a enamorar esta el chiquero de Quequén, y cientos de camioneros protestando con empresarios off shore que pagan un canon anual de 15.000 y recaudan  más de un millón quinientos mil pesos, sin obras realizadas, o deberán aclararnos la concesión del Camping Americano, todavía en definición judicial, y contratar al FBI para dilucidar de quien es Punto Playa la venta dudosa ambulante en las arenas veraniegas.

Para volver a enamorar deberá decirle al pueblo que ha pasado con nuestro turismo,  y que nuestra difusión es mucho más que pagar anualmente por una bandera de visite Necochea en cancha de Chacarita.

El intendente va por su reelección, primero hizo su rendición.

Quiere un radicalismo en la calle y volver a enamorar. El radicalismo está de pie y caminará estas calles como lo ha hecho siempre en cien años de vida, la duda es si el primer mandatario esta en condiciones de enamorar,  o aquel encanto del 2003 ya fue tiempo pasado.