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Por Horacio Castelli

Hace una semana empezó un nuevo año y las inversiones a Puerto Quequén no llegan y no hay perspectivas de que algo ocurra durante el 2009. La lógica marca que en un año de recesión mundial no habrá dinero para nuestro puerto.

La obra de la Escollera Sur que tanto se luchó para conseguir para haber sido asimismo una condena para el puerto. Parece que las autoridades provinciales y nacionales no están dispuestas a poner un peso, dólar o euro más.

Durante el año 2008 el gobierno de Daniel Scioli anunció y aportó dinero para todos los puertos bonaerenses menos para Puerto Quequén, excepto el mural que se pintó en la punta de la escollera y eso no está orientado para volver competitiva nuestra estación marítima en el orden de las exportaciones cerealeras, solo es un paseo turístico.

– Los cascos hundidos siguen en el fondo del río,

– el dragado no parece cumplir con las expectativas deseadas (y ahora Boskalis parece querer un nuevo acuerdo),

– no se ha instalado en varios años una sola empresa en los terrenos del Consorcio

– la playa de contenedores no existe,

– los tanques de Ponal número 10, 11 y 12 no se trasladaron como determinó en su momento la Secretaría de Medio Ambiente de la Provincia,

– el gobernador como tal no ha visitado el Puerto (lo hizo solo como candidato e inauguró la Escollera a 1.500 metros de distancia),

– se anunció la construcción de muelles para las lanchas de pesca sin lanchas pesqueras ni fábricas que utilicen sus capturas

Son demasiados puntos sin concretar como para ser optimistas sobre las políticas que se implementarán desde los gobiernos nacional y provincial hacia nuestra estación marítima.

Y como la creación de los Consorcios Portuarios se hizo en base a la teoría de los Agentes de Poder Locales, sería hora que quienes ostentan el poder suficiente para modificar esta realidad lo hagan.