Luego de reunirse en el Hotel Libertador, Macri fue a la televisión y le marcó los tiempos al presidente electo.
Algo está pasando entre Javier Milei y Mauricio Macri. El ex presidente visitó de urgencia al libertario en su bunker del Hotel Libertador, en medio de las resistencias de Milei a nombrar al ministro de Economía, como le exige el círculo rojo.
Pero lo más sugestivo pasó después. Luego de esa reunión, de la que no hubo fotos, Macri se trasladó hasta los estudios de TN y en una entrevista con Morales Solá le puso un plazo terminante a Milei: «El presidente electo tiene seis meses durísimos en los que tiene que estabilizar la Argentina».
«Tiene que hacer un shock fiscal con una baja bestial del gasto y arreglar este globo monumental de las leliq», agregó Macri que sigue con la fijación de los semestres que hundieron su gestión.
La movida de Macri ofrece múltiples lecturas pero transmite cierta urgencia por movilizar a Milei, que luego de su triunfo de este domingo se recluyó en su suite del Hotel Libertador y postergó sin fecha previa la reunión con el presidente Alberto Fernández para iniciar la transición, que estaba prevista para este lunes por la mañana.
La advertencia de Macri a Milei que tiene que empezar su gestión con un ajuste «bestial» sorprende porque se supone que Milei es el primer convencido de ese paso, que fue eje de su campaña con la motosierra. Sin embargo, este lunes sorprendió al anunciar que por ahora no eliminará los subsidios a la energía.
Llama también la atención la resistencia a sumarse al próximo gobierno de los dirigentes de primera línea del PRO que acompañaron a Macri en su cierre político con Milei.
LPO
