El Grupo Clarín envió una carta documento al presidente de la Autoridad Federal de Servicios de Comunicación Audiovisual Martín Sabbatella, en la que amenaza de iniciarle acciones penales por su desempeño al frente del organismo.
“No hay ningún trato desigual”, señaló Sabbatella en respuesta a las acusaciones realizadas por Clarín y continuó: “Afsca aplica la ley en igualdad de condiciones a todos los licenciatarios, por supuesto atendiendo a la diversidad de características y a la especificidad técnica de los distintos servicios comprendidos por la ley”.
La compañía también intimó en similares términos a los directores de AFSCA Eduardo Rinesi, Ignacio Saavedra, Claudio Schifer y Néstor Avalle, y excluyó de la amenaza a los representantes por la oposición Gerardo Milman y Marcelo Stubrin.
Sabbatella consideró que “el trato desigual de que se queja Magnetto debe ser porque, por supuesto, ahora no es igual que antes.
Antes ellos se aprovechaban de la falta de una ley de la Democracia y presionaban legisladores para que no la hubiese nunca; ahora, esa ley existe y están obligados a cumplirla.
Antes ellos tenían el monopolio del fútbol y fundían cableoperadores para quedarse con sus empresas; ahora el fútbol es para todos y los cableoperadores pymes y cooperativos se instalan con libertad en el mercado audiovisual generando competencia.
Antes ellos apretaban y atemorizaban a políticos que los terminaban protegiendo; ahora hay un Gobierno que les dijo basta y les empezó a aplicar la ley para que dejen de tener privilegios por sobre el resto”.
“Así que en ese sentido es cierto: el trato no es igual, no es igual que antes cuando ellos tenían privilegios. Ahora es igualitario y trabajamos para que todos puedan expresarse en un mercado plural y democrático.
Queremos que estén todas las voces; aún aquellas que mienten, como Clarín”, afirmó el presidente de AFSCA, quien en el escrito de la empresa es cuestionado por afirmar que “nada extraña de parte de esta empresa, porque son inescrupulosos, tramposos, mentirosos e incumplidores de la ley”.
En las cartas documento enviadas hace una semana a las autoridades del organismo, el multimedios conducido por Héctor Magnetto intenta mostrarse como víctima de la aplicación de la ley de Servicios de Comunicación Audiovisual.
“Si no fuera por el daño que le hacen a la sociedad y al país, resultaría gracioso que Clarín se ponga en víctima.
Pero Clarín no es víctima de nada -manifestó Sabbatella-. Víctimas son los abonados a los que Cablevisión les cobra cualquier precio y les impide ver Pakapaka, Telesur, o las señales de noticias nacionales y provinciales, a pesar de que la Justicia ya le exigió que los ponga en la grilla como resolvió AFSCA; víctimas son las productoras y las señales de TV que sufren la distorsión de la medición de audiencia a favor del monopolio; víctimas son los cableoperadores a los que fundió Cablevisión; víctima es la audiencia de radio y televisión a la que el Grupo Clarín intenta engañar cada día con una catarata de mentiras y noticias manipuladas”.
En relación al carácter intimidatorio que tienen las cartas documentos enviadas por el holding de medios, el titular de AFSCA señaló: “Magnetto tiene que dejar de mirarse en el espejo del ascensor de su empresa y empezar a mirarse en el espejo de la Democracia; y darse cuenta, por fin, que ya no está en condiciones de amenazar a nadie.
Ni nosotros ni nadie del equipo que formamos parte del Gobierno de la presidenta Kirchner, estamos en la lista de los que le temen a Clarín y le hacen los mandados. Además, la inmensa mayoría de la sociedad es consciente de que Magnetto es un empresario ambicioso que no lucha por la libertad ni el pluralismo sino por sus intereses económicos y políticos”.
“Uno de los grandes logros derivados del debate de esta ley es que la sociedad le pone un signo de pregunta a lo que ve y lo que escucha; todos sabemos que existen intereses detrás de lo que difunden los medios”, concluyó Sabbatella.