La posible reestructuración o «desguace» del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) por parte del gobierno de Javier Milei genera incertidumbre y preocupación en la comunidad local.
En la mañana de Radio Rivadavia Necochea, Horacio Castelli dialogó con Juan Erregerena y Luis Lanzavecchia, quienes analizaron la situación actual del organismo.
Juan Erregerena, referente del INTA, manifestó la falta de información oficial sobre las medidas que se tomarán: “En principio no tenemos claro cuáles son las medidas, todos son trascendidos. Sí hay un funcionario público de alto rango que lo ha apuntado al INTA mediáticamente y, con los trascendidos de radio pasillo, algún comentario que hizo el propio director nacional del INTA, respecto a los riesgos que se estaba incurriendo”.
Erregerena destacó la preocupación del personal, enfatizando que el INTA es una institución no politizada que ha trascendido en las comunidades, vinculada al sector primario y al desarrollo, sin medir baterías políticas. “Es injusto que intenten acusarnos de estar politizados”, sentenció.
Un organismo con arraigo territorial y participación local
Por su parte, Luis Lanzavecchia se refirió a la particularidad del INTA en su estructura y su arraigo local. Destacó el rol del Consejo Local, un espacio que diferencia al INTA de otras instituciones estatales, donde participan activamente sectores del sector primario, gremiales (como CONINAGRO y Federación Agraria), y el sector académico orientado a las ciencias veterinarias y agronómicas.
“Ese espacio lo tenemos aquí con amplia participación del sector productivo local, los referentes del sector educativo orientado a las ciencias agropecuarias como es la escuela Ramón Santamarina, el Instituto de Formación Docente.
En definitiva, en pocas palabras, el INTA es de los productores y de los actores que contribuyen al desarrollo local con territorialidad, en particular en Necochea”, afirmó Lanzavecchia.
El impacto del INTA en el territorio: del campo a la mesa
Juan Erregerena también hizo hincapié en el amplio alcance territorial del INTA, que se extiende «De punta a punta del país», siendo uno de los organismos estatales con mayor presencia, junto con el Banco Nación.
Mencionó ejemplos concretos de la labor del INTA en diversas regiones, desde la Patagonia con la problemática de la desertificación, hasta zonas frutícolas que buscan mejorar la calidad de sus productos para exportación.
En el ámbito local, Erregerena resaltó la importancia del INTA en la producción hortícola de Mar del Plata, el segundo cinturón hortícola más importante del país, donde se exporta kiwi y diversas variedades de papa con el asesoramiento del instituto.
En Necochea, el INTA juega un rol fundamental en la producción de hortalizas: “El 50% o más del alimento que se consume en base a verduras es de Necochea y nosotros los organizamos a esos productores, incorporando riego e invernáculos que nosotros les enseñamos a realizar. Hoy se puede comer tomate en invierno, cosa que hace algunos años no se lograba”.
Erregerena explicó que esta innovación tecnológica no solo alarga la temporada del tomate, aumentando la productividad, sino que también genera un impacto económico local.
“Ese proceso implica que el producto que se vende, que es local, vuelve al negocio de Necochea, porque esa persona que está trabajando en esa quinta va y compra la ropa acá o el electrodoméstico localmente o consume localmente.
Junto con el municipio, en este momento lo acompañamos, por ejemplo, en un proceso que implicó la marca ‘Hecho en Necochea’, que ya ha salido, donde el consumidor va a ver el logo y sabrá que se realizó en Necochea”, concluyó.
La preocupación por el futuro del INTA se basa en el reconocimiento de su rol esencial en el desarrollo productivo, la investigación y la transferencia de tecnología a lo largo y ancho del país, con un impacto directo en la economía y la calidad de vida de las comunidades.