Alarma en el Sector Pesquero Argentino por los Aranceles de Trump: «Podría ser el Golpe Final»
La sombra de nuevos aranceles impuestos por Estados Unidos ha desatado la preocupación y la incertidumbre en el sector pesquero argentino.
Empresarios y trabajadores del rubro advierten que la medida, de concretarse, podría significar un golpe devastador para una industria que ya atraviesa una profunda crisis con despidos en aumento.
Estados Unidos se posiciona actualmente como el tercer mercado de destino para las exportaciones pesqueras argentinas, representando una porción significativa de los ingresos del sector.
Ante la posibilidad de verse encarecidos por los aranceles, los empresarios expresan su angustia por la falta de margen para absorber los costos y mantener la competitividad en el mercado estadounidense.
«No tenemos margen para bajar los precios», aseguró un importante referente del sector, quien prefirió mantener su anonimato por la sensibilidad de la situación.
«Nuestros costos ya están al límite y una medida de este tipo podría significar la inviabilidad de muchas empresas, llevando al cierre y a la pérdida de aún más puestos de trabajo».
La potencial imposición de aranceles por parte de la administración de Donald Trump se suma a un panorama ya complejo para la pesca argentina.
La crisis económica local, la inflación y la falta de políticas de apoyo han debilitado al sector en los últimos meses, traduciéndose en una preocupante escalada de despidos en plantas procesadoras y embarcaciones.
«Ya estamos viendo cómo la crisis nos golpea con fuerza», lamentó un trabajador portuario de Necochea. «Cada vez hay menos barcos saliendo y más compañeros quedando sin trabajo. Si se suman los aranceles de Estados Unidos, tememos que sea el golpe final para muchas familias que dependemos de la pesca».
La noticia ha generado un fuerte debate y llamados urgentes al gobierno nacional para que intervenga y explore vías diplomáticas para mitigar el impacto de la medida.
Representantes del sector pesquero se encuentran analizando posibles estrategias y buscando el apoyo de las autoridades para evitar lo que consideran una catástrofe para la industria y las miles de familias que dependen de ella en todo el país.
La incertidumbre reina en los puertos y las plantas procesadoras a la espera de definiciones sobre la política comercial estadounidense.
Sin embargo, el mensaje desde el sector pesquero argentino es claro y contundente: los aranceles de Trump representan una seria amenaza que podría asestar un golpe fatal a una actividad económica crucial para muchas comunidades costeras.