El club noruego Tromso, el primero en proponer un boicot del Mundial 2022 para protestar por las condiciones laborales de los obreros inmigrantes en Qatar, presentó «la primera camiseta de fútbol del mundo con un código QR» para defender los Derechos Humanos en ese país.
La casaca, desarrollada en colaboración con Amnesty International, presenta un códice QR que, escaneado, reenvía a un sitio que ofrece información sobre los Derechos Humanos y el «sportswashing», la acción de los países que pretenden «limpiar» su imagen organizando grandes eventos.
El equipo, que compite en la primera división de Noruega, lucirá la camiseta nueva el domingo 12 en el partido contra Viking, válido por la última fecha previa a la pausa invernal.
«Esperamos despertar más discusiones, más debates sobre el tema», declaró Tom Hogli, ex jugador y ahora responsable de las relaciones públicas del Tromso.
Qatar rechazó enfáticamente cualquier crítica sobre el tema, insistiendo en haber reformulado la ley laboral y haber introducido un salario mínimo.
Amnesty International reconoció las medidas adoptadas por el Emirato, pero exhortó a sus autoridades a interrumpir los abusos contra los obreros inmigrantes, muchos de los cuales están involucrados en la constricción de estadios e infraestructuras para el Mundial 2022.
La idea de un boicot de Noruega al Mundial 2022 registró cierta popularidad en el país al inicio de este año, pero la federación de fútbol local votó contra esta idea en junio pasado.
En tanto, la selección noruega no logró clasificarse a la Copa del Mundo. (ANSA).