Pese a que el neerlandés recuperó la punta del campeonato el domingo tras el Gran Premio de Turquía que conquistó el finlandés Valtteri Bottas, la sensación en Red Bull hoy es similar a la de una derrota en la puja que sostiene con Mercedes en esta temporada de la Fórmula 1.
Los 15 a 20 kilómetros de velocidad de punta adicionales que mostró el equipo alemán en Estambul encendieron las alarmas en la escudería anglo-austríaca en clave de las seis competencias que restan para el final del campeonato en el que Mercedes manda en la Copa de Constructores.
A la situación inesperada se refirió Helmut Marko, una de las voces principales en la escudería Red Bull, según el cual en Turquía «parecía que Mercedes hubiese corrido toda la carrera con el DRS».
Según los datos recogidos por su equipo, el británico Lewis Hamilton, que terminó quinto partiendo desde el undécimo puesto y relegó la punta del certamen parecía volar en las rectas tras haber reemplazado piezas de su unidad de potencia que derivaron en la pérdida de diez posiciones en la grilla tras haber logrado la pole.
«Deberemos tratar de maximizar todo el paquete para tratar de compensar esta imprevista velocidad de Mercedes», dijo al respecto Marko, quien tras algunas dificultades padecidas por Verstappen destacó que con el mexicano Sergio Pérez, que finalizó tercer en Estambul «pudimos haber sumado un punto con la vuelta más rápida».
«Pero no quisimos tomar riesgos para garantizar que los dos pilotos terminasen en el podio», explicó al respecto el directivo, preocupado por el repentino incremento de la potencia de los motores Mercedes.
«No tenemos cómo equiparar semejante velocidad de punta», reconoció el jefe del equipo Red Bull, Christian Horner, según el cual «en la primera parte de la temporada, con el alerón posterior, pudimos acercarnos, pero ahora parece imposible».
«Mercedes está atravesando, como todas las escuderías, problemas de confiabilidad que resultan insólitos para un equipo así, pero hoy tienen una velocidad impresionante», reiteró al decirse «sorprendido» por esta situación.
Para explicar sus dichos, Horner destacó que «algunos datos sobre la velocidad que alcanzaron en las rectas reflejan que giraron entre 15 y 20 kilómetros por hora más rápido, incluso por encima de lo que les hubiera permitido el uso del DR (sistema de reducción de la resistencia aerodinámica)».
Mercedes rechazó las sospechas y afirma que nada cambió en sus motores, más allá de haber montado piezas de reemplazo en el propulsor de Hamilton en Turquía.
El séptuple campeón mundial llegaba como líder del campeonato a Estambul y quedó ahora seis puntos por debajo de Verstappen, que el fin de semana previo en Rusia había tenido que reemplazar el motor de su Red Bull también y logró limitar los daños al cerrar segundo a espaldas de Hamilton tras haber largado desde el fondo de la grilla.
Según la BBC, la eficiencia de Mercedes podría responder a que los motores de combustión interna sufren una degradación con el tiempo y el nuevo propulsor de Hamilton pudo haberle dado alguna ventaja en términos de prestación respecto del que había utilizado antes de la última competencia. (ANSA).