Los agricultores y ganaderos están en pie de guerra en España desde finales de enero por los bajos precios en origen de los productos agrarios.
En una nueva jornada de movilizaciones en varios puntos del país, los trabajadores del campo han colapsado varias carreteras reclamando una regulación de precios que evite su situación de precariedad.
«Es imposible seguir adelante con estos precios que ni siquiera cubren los costes de producción», denunciua un granjero. Otro cuenta que se sienten «agobiados» y quieren apoyo del Gobierno y la sociedad para poder seguir trabajando en su sector.
En Valencia, Lleida y Córdoba se han dado las marchas más importantes, pero la jornada anterior unos 3.000 vehículos agrarios llenaron las calles de Málaga.
Las asociaciones de agricultores exigen el apoyo del gobierno y de las administraciones regionales, en un momento en que Bruselas está considerando recortar los fondos agrícolas.
Francisco Moscoso, representante de UPA Málaga, explica que «los precios son más bajos que los costes de producción. «No podemos soportarlo más. Es cierto que esta situación no es algo de ayer. No es responsabilidad de nuestro actual Gobierno. Llevamos 50 o 60 años sufriendo esto».
«Necesitamos dignidad, un Gobierno serio y fuerte, y una sociedad que eche una mano en este sentido», dice Antonio Rodríguez, representante de COAG Málaga.
Las nuevas generaciones de agricultores se están viendo obligadas a abandonar el sector porque, denuncian, muchas cosechas valen ahora el mismo precio que hace más de 30 años.