El informativo matinal para el que trabajaban la periodista y el cámara asesinados en directo por un excompañero ha guardado un minuto de silencio a la hora en que se produjo el ataque.
El canal de televisión, filial de la CBS, ha difundido fotos de Alison Parker, de 24 años y del cámara Adam Ward, de 27.
El autor del tiroteo, Vester Flanagan, murió horas más tarde, por las heridas producidas al intentar suicidarse tras verse rodeado por la policía.
En un fax de 23 hojas enviado a los medios había explicado los motivos de su ataque, que su ira había ido creciendo por la discriminación racial por ser negro y gay. El padre de Alison Parker pidió a las autoridades un mayor control sobre las armas.
“Los políticos tienen que hacer frente a la Asociación Nacional del Rifle y cerrar algunas de estas lagunas para que los locos no consigan armas. Estoy seguro que la reacción de muchos de estos chiflados será decir: ‘Bueno, si ella hubiera tenido una pistola esto no habría ocurrido’. Ella podría haber tenido un fusil de asalto en su cintura, pero no podría haberlo evitado. Hay demasiadas armas en manos de locos”, dijo Andy Parker.
El doble asesinato ha vuelto a despertar, otra vez, el debate de las armas en Estados Unidos, pero sin grandes esperanzas de cambio por la fuerza de grupos como la Asociación Nacional del Rifle, que defiende la segunda Enmienda de la Constitución estadounidense.