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Dr. Mario Juliano

Un albañil que había sido condenado a cuatro años de prisión por homicidio deberá ser juzgado nuevamente, ya que el Tribunal de Casación Penal bonaerense anuló el juicio al considerar una «gravedad institucional» que la pena impuesta haya sido menor a la prevista en el Código Penal para esa clase de delitos.

Incluso, en su resolución los camaristas fustigaron duramente al tribunal de Necochea que llevó adelante el juicio.

Se ordenó que el albañil se siente nuevamente en el banquillo frente a jueces «hábiles» para que lo condenen a una pena de homicidio que vaya entre 8 y 25 años, el margen que prevé el Código Penal, según el fallo.

La medida recayó sobre Carlos Alberto Sorensen, un albañil de 49 años acusado de apuñalar, en la noche del 22 de diciembre de 2001, a un hombre que venía con su esposa y otra mujer caminando por la calle porque pensó que se reían de él.

Sorensen confesó que cuando se levantó de la siesta salió a la calle con un cuchillo en el bolsillo («producto de un olvido involuntario») y cuando hablaba con una vecina vio pasar a un joven de 25 años, con dos mujeres que se reían, dice el fallo.

El Tribunal Oral en lo Criminal de Necochea entendió que, al momento del hecho, era imputable, aunque su «capacidad estaba disminuida»».

Los jueces Mario Juliano y María Angélica Bernard consideraron que el mínimo era excesivo y declararon inconstitucional el artículo 79 del Código Penal y el artículo 12 del mismo código y le aplicaron a Sorensen una pena de 4 años, con la disidencia del juez Alfredo Noel.

Casación advirtió que los jueces sólo pueden «seleccionar la pena a imponer, siempre que se ajusten a los parámetros impuestos en la escala de la figura de que se trate»», porque de lo contrario se «desequilibraría el sistema constitucional de los tres poderes».(LA PRENSA)

Más repercusiones…

http://www.eldia.com.ar/edis/20080509/poli_popu24.htm