Las comunidades católicas de Necochea y Quequén se adhirieron a recomendaciones del Obispado de Mar del Plata por la actual emergencia sanitaria e informaron medidas específicas de prevención en la concurrencia a los templos y la celebración de la Misa.
Se aconseja, por ejemplo, sentarse dejando espacio libre entre cada concurrente; evitar besos, abrazos o darse la mano tanto al llegar o al despedirse; en el saludo de la paz, reemplazar el contacto físico por otros gestos igualmente amigables, y no tomarse de la mano en el Padrenuestro.
Respecto de la forma de comulgar, no será en la boca sino sólo en la mano, tratando de que la mano del que comulga no entre en contacto con la del ministro; renovar la ventilación del ambiente antes, durante y después de las celebraciones, y tampoco tocar o besar imágenes. Incluso también se contempló la opción de algunas personas de no asistir a celebraciones o procesiones si las bajas temperaturas son factor principal de riesgo para su salud.
Estas precauciones se suman a las ya exigidas a nivel nacional, entre otras, el lavado frecuente de las manos, toser o estornudar con protección descartable, y no participar en eventos comunitarios si se tienen síntomas de cualquier gripe o resfrío.
