El secretario general de la ONU ha llamado este lunes a frenar el cambio climático frente a la Asamblea de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente, donde ha lamentado la «triple emergencia ambiental» de alteración del clima.
«Es una año crítico para restrablecer nuestra relación con la naturaleza», ha aseverado Guterres, quien ha apelado una vez más a «aumentar la ambición y la acción».
«La urgencia de actuar nunca ha sido más clara», ha agregado. Según datos aportados por la ONU, 34 millones de personas en el mundo padecieron inseguridad alimentaria aguda en 2019 debido al cambio climático, mientras los peligros relacionado con esta situación provocaron cerca de 35 millones desplazamiento en 40 países.
Precisamente este será la temática que abordará el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas en una reunión sobre el efecto del cambio climático en la seguridad internacional y paz mundial.
El primer ministro de Reino Unido, Boris Johnson, quien ostenta la presidencia del Consejo este mes, presidirá la reunión virtual en la que se espera que también participe Guterres.
En la cita también intervendrán el presidente de Francia, Emmanuel Macron, el ministro de Exteriores de China, Wang Yi, y el enviado especial para el clima de la Administración norteamericana, John Kerry.
Así, el encuentro se centrará en los riesgos que se desprenden del cambio climático en relación con la paz mundial, ya que, entre otras cuestiones, este podría causa migraciones masivas y conducir a conflictos armados, según informa la agencia Bloomberg.
En este sentido, Johnson advertirá en la cita de que el cambio climático representa una «grave amenaza para la paz y seguridad globales» e incidirá en que «a diferencia de muchos temas que trata el Consejo, este es uno que sabemos exactamente como abordar», según recoge uno de los extractos que el mandatario británico ha preparado para la reunión.
El primer ministro de Reino Unido abogará por «ayudar a los países vulnerables a adaptarse al cambio climático y reducir emisiones globales a cero», de forma que se proteja la diversidad y su «prosperidad y seguridad».
La reunión servirá también para abordar el riesgo de que parte de los países desarrollados no cumplan con los 100.000 millones de dólares (unos 82.000 millones de euros) anuales de financiación para la lucha contra el cambio climáticos en países de bajos recursos.