El Pentágono aseguró que Estados Unidos no está robando petróleo de Siria, a pesar de que se mantienen tropas estadounidenses al este del país para proteger los campos petroleros.
«Estados Unidos no se está beneficiando de todo esto, las ganancias están volviendo a las FDS», dijo el portavoz del Pentágono Jonathan Hoffman, refiriéndose a las Fuerzas Democráticas Sirias, los kurdos que lucharon en conjunto con fuerzas estadounidenses contra el grupo yihadista Estado Islámico (EI).
El objetivo es «dar a los kurdos en la región, las fuerzas del FDS, una fuente de ingresos y la posibilidad de aumentar el poder en su campaña militar contra el EI», dijo en una conferencia de prensa.
«Por lo tanto, es para evitar que el EI tenga acceso y también para permitir que los kurdos y las FDS controlen» el petróleo.
Cuando el EI controló estos campos petroleros en 2015, el grupo yihadista extrajo 45.000 barriles por día, con un ingreso de 1,5 millones de dólares diarios que les permitió financiar sus ataques en el país y en el extranjero, recordó el vicealmirante William Byrne, del Estado mayor de Estados Unidos.
«No permitiremos que eso vuelva a suceder», agregó.
Después de anunciar el 6 de octubre la retirada de 1.000 soldados estadounidenses desplegados en el noreste de Siria -que dio lugar a una operación militar de Turquía contra las fuerzas aliadas kurdas de Washington en la lucha anti-yihadista-, Donald Trump dijo que un «pequeño número de soldados estadounidenses» permanecería en Siria, «en áreas donde hay petróleo».