Por Horacio Castelli
Se acerca una nueva temporada de verano y los servicios turísticos, otra vez, serán de calidad inferior a lo que se merece nuestro balneario.
No existe en la actualidad un proyecto serio sobre los servicios turísticos a ofrecer, un plan de concesiones a largo plazo que de previsibilidad a los inversores y mucho menos una definición sobre el tipo y calidad de los mismos.
Se sigue gastando tiempo en prorrogar lo que existe (de mala calidad), y no se producen políticas de estado serias.
Sin dudas esta será otra temporada perdida y van…
Por supuesto que este enunciado indica que el problema no es “solo” de la actual administración del Dr. Facundo López, pero desperdició en estos dos primeros años la oportunidad de implementar un proyecto que estaba elaborado y que le hubiera dado calidad y previsibilidad a los servicios turísticos.
La excusa del Frente Costero, no puede mantenerse más tiempo, por que es eso, una excusa para no avanzar en medidas que deben tomarse sin perdida de tiempo.
El proyecto de subastar el Complejo Casino no va a tener ninguna posibilidad de éxito porque alrededor no hay nada preparado, ni proyecto en marcha.
Si los actuales funcionarios de las distintas áreas que están elaborando el mencionado proyecto creen que la sola puesta en subasta de los lotes y el edificio va a ser suficiente para atraer capitales están en un grave error.
Una ciudad es turística no solo por sus atractivos…
Si así fuera, varios centros turísticos nacionales e internacionales no podrían ni pensar en esa actividad. Pero tuvieron la capacidad de estructurar un proyecto general y abarcativo que permitió ofrecer servicios y posibilidades que atrajeron a los inversores primero y los visitantes después.
Necochea es una ciudad desorganizada, que no aprovecha los atractivos turísticos que tiene y solo ofrece sus extensas playas, pero eso solo no alcanza.
No se ha trabajado una oferta que existe en todos los centros turísticos, como son las excursiones que puedan disfrutar los visitantes y los lugareños, y atractivos no nos faltan. Incluso se pueden incorporar visitas a lugares cercanos como el Museo de Fangio en Balcarce, el circuito católico de Tandil, las lagunas para la pesca ecuestre, las historias que poseen localidades como Claraz y Ramón Santamarina, etc.
El 12 de octubre pasado nuestra ciudad cumplió 136 años de vida y todavía no terminamos de organizarnos adecuadamente, excepto algunos años que nos vimos favorecidos por el remanente que quedaba de Mar del Plata.
Políticos e inversionistas despiertos comenzaron a abrir balnearios más cercanos a Capital Federal y nosotros, en lugar de aprovechar el envión de turistas que ya teníamos nos quedamos con la misma oferta.
Hoteles viejos, sin actualización, con falta de visión turística y perdiendo el tren de una actividad que nos arrebataron hasta ciudades sin playas y con pocos atractivos naturales, creando ofertas.
Una nueva temporada, y una nueva oportunidad perdida. Existe un proyecto superador que prefirieron dejarlo de lado por mezquindades y acuerdos que nunca fueron explicados adecuadamente.
Lo único cierto es que se sigue perdiendo el tiempo y como dijo Benjamín Franklin “el tiempo es oro” y se nos sigue escurriendo de las manos.