Yahia, herido, abraza a su hija muerta, Rafah. La madre embarazada también ha muerto.
Una mujer palestina, de 30 años, embarazada y su hija de 2 años han muerto en un bombardeo israelí contra la franja de Gaza. Otros cuatro miembros de su familia han resultado heridos.
Israel ha confirmado haber llevado a cabo bombardeos en dos instalaciones de fabricación de armas de Hamás en el norte de Gaza, en respuesta al lanzamiento ayer de un cohete contra territorio israelí.
La fuerte potencia de los bombardeos provocó el derrumbe de la casa en la que vivían las dos víctimas mortales, que ya había sido destruida en los bombardeos israelíes del año pasado, pero la habían reconstruido.
La muerte de estas dos palestinas eleva a 23 los palestinos falecidos desde principios de mes. Hay, además, más de un millar de heridos.
La ira de los palestinos crece cada día. Ayer se produjeron enfrentamientos con las fuerzas del orden israelíes en las ciudades cisjordanas de Ramala y Hebrón.
El último incidente se ha produido a primera hora de esta mañana en un puesto de control cerca del asentamiento judío de Maale Adumín, donde una palestina ha resultado gravemente herida al hacer explotar el artefacto que portaba. Un policía israelí ha sufrido heridas leves.
Ayer tres palestinos fueron abatidos por las fuerzas israelíes en Jerusalén Este y La ola de violencia se ha cobrado también la vida de cuatro israelíes y dejado una quincena de heridos en ataques palestinos.
