El Concejo deliberante de Necochea vive en estos días una suerte de anarquía legal a raíz de la decisión de algunos concejales de realizar interpretaciones antojadizas para tomar decisiones que no son muy claras y producen dudas en la comunidad, lo que es sumamente preocupante. Esto sucedió con el aumento del boleto del transporte urbano de pasajeros.
El aumento puede ser retrotraído ante una presentación judicial solicitando una medida cautelar el considerarla ilegal porque el HCD decidió otorgar el aumento «ad referéndum» por mayoría y no por unanimidad como se venía realizando hasta el momento.
Esta decisión la tomaron algunos concejales (Asa, Aued, Rojas, Diez), y comunicado en la reunión de Comisión Parlamentaria de la jornada de ayer lunes 6, aunque la aprobación ya la habían tomado días atrás haciendo uso de las nuevas «reglas» no escritas.
Parece que para algunos ediles formar mayorías circunstanciales es suficiente para decidir como manejarse dentro del recinto sin importar los reglamentos preexistentes y las leyes provinciales que le dan un marco legal a la toma de decisiones.
Esta es una realidad que viene sucediendo desde hace años, por ejemplo, con la formación de las comisiones del deliberativo donde, contra toda lógica, se nombran los presidentes y secretarios pero jamás se determinan quienes son los vocales.
En ningún cuerpo deliberativo serio se conforman de esta manera las comisiones porque las mismas tienen un funcionamiento simil a las sesiones donde se puede plantear la decisión de dar o no quorum, de presentar despachos por minoría, donde se deben votar las medidas a adoptar y las discusiones se deben dar en un marco de real trabajo democrático. Esto en Necochea no sucede. Hay reuniones de comisión donde solamente participa el presidente, firma los despachos y de esa manera integra posteriormente el orden del día de las sesiones.
Hoy en día en el Concejo Deliberante de Necochea la anarquía es una constante y quienes dicen tener experiencia legislativa están demostrando que tienen capacidad para los acuerdos parlamentarios sin claridad ante el pueblo que representan.
