Bloque FJPV (Foto ahorainfo)
Durante el transcurso de la exposición con la presencia de todos sus integrantes, a través de su presidenta Ana Asa, el bloque solicitó enfáticamente al Intendente Molina que se haga cargo de sus actos y asuma la responsabilidad de conducir la comuna y no le eche la culpa a los demás en vinculación al incendio en el Parque «Miguel Lillo» del 1º de enero.
Con expresiones que marcaban el descontento por la actitud del Ejecutivo, se remarcó que «hay peligro en el Parque y cualquier actitud desaprensiva de nuestra parte puede ocasionar un incendio y una desgracia así que apelamos a la responsabilidad de todos y cada uno de nosotros».
Continuó expresando Ana Asa, que «además apelamos fundamentalmente a la responsabilidad del señor Intendente Municipal. Y decimos esto porque la verdad que nos llamó poderosamente la atención en el día de ayer, ver al señor intendente hacer declaraciones descriptivas, narrativas como si el incendio estuviera ocurriendo en otro lugar, en otro distrito, o si tuviera que ver con la responsabilidad de otras autoridades, porque en realidad estaba narrando lo que cualquier vecino podría narrar».
«Pero el es la autoridad máxima de nuestro distrito, y el máximo responsable de prevención y de solución de los problemas que nos puedan aquejar».
Se informó que el responsable del mantenimiento del sector no ha sido especificado ya que no se conoce el convenio que existe entre el municipio y la empresa encargada del raleo y cuáles son las obligaciones que cada parte tiene sobre ese sector.
También se puntualizó que los ediles dialogaron con el Jefe de Bomberos de Necochea y que les confirmó que desde esa jefatura se la había alertado sobre los peligros inminentes que existían de producirse un incendio.
Horas antes el ejecutivo con la presencia de Mario Diez, Secretario de Gobierno comunal habría desmentido este alerta que desde Bomberos se le habría efectuado aunque de manera informal y sin quedar nada escrito lo que dificulta saber quién dice la verdad.
La realidad es que el Parque Miguel Lillo en parte se incendió, que era una situación sobre la que se ha alertando desde hace mucho tiempo y que el presupuesto designado durante el 2008 es exiguo para realizar las obras necesarias.
El segundo tema que se trató es la suspensión, por parte de las empresas de Transporte de Pasajeros (Ómnibus), del boleto social en forma unilateral sin que el Ejecutivo haya tomado alguna decisión de diálogo con las empresas para lograr una solución. Lamentando, además, que siendo una de las pocas ciudades que cuenta con este boleto se pierda por no tomar la decisión de sentarse a una mesa de diálogo y buscar las soluciones necesarias para las empresas y los usuarios.
