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AGRO: Proyectan mejoras en la producción de Trigo y Cebada

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La Bolsa de Cereales proyecta una mejora en la producción de trigo y cebada para la campaña 2025/26 en Argentina, con estimaciones de 20,5 millones de toneladas de trigo (en 6,7 millones de hectáreas) y 5,1 millones de toneladas de cebada (en 1,3 millones de hectáreas).

A pesar de este panorama productivo alentador, la Bolsa advierte que Argentina continúa perdiendo terreno en el mercado global de exportación agroindustrial debido a la falta de reformas estructurales.

El contexto internacional presenta incertidumbre por los posibles conflictos arancelarios entre EE.UU. y China.

A nivel global, los stocks de trigo están en mínimos de 10 años, y se anticipa que el consumo supere la producción en la próxima campaña.

Brasil, un importante comprador de trigo argentino, podría reducir su demanda debido a una buena cosecha local.

En cuanto a las condiciones locales, las lluvias recientes son favorables para la siembra, y la ecuación económica muestra signos de recuperación con precios del trigo levemente superiores y costos disminuidos.

La posible baja de los derechos de exportación del 12% al 9% podría fortalecer aún más la rentabilidad. Se espera un uso de tecnología igual o superior al ciclo anterior.

Un dato clave es la pérdida de participación de Argentina en el mercado mundial de trigo, a pesar de mantener un volumen de exportación promedio en la última década. Otros países han ganado relevancia.

Si bien se reconocen avances en estabilidad macroeconómica y desregulaciones, la Bolsa de Cereales enfatiza la necesidad de medidas estructurales para mejorar la competitividad.

Se estima que el valor agregado de las cadenas de trigo y cebada alcanzará los 4.723 millones de dólares (un aumento del 31%), y las exportaciones de estos cereales se incrementarían un 15%, llegando a los 4.225 millones de dólares.

El Presidente de la Bolsa de Cereales valoró positivamente las recientes decisiones gubernamentales, pero insistió en la importancia de reducir la presión fiscal y generar políticas que incentiven la inversión y la producción a largo plazo.