El celular de Magalí Vera, víctima del femicidio cometido por su pareja Javier Cerfoglio, no reveló información relevante sobre la violencia de género que sufría.
Sin embargo, las autoridades confirmaron que seguirán analizando los datos incautados, ya que hay mucha información por revisar.
El femicidio de Vera sigue generando conmoción en Necochea, y las autoridades aún no han determinado con certeza cómo era la relación entre la víctima y Cerfoglio, que duró varios años.
Cerfoglio fue trasladado a la cárcel de Batán debido a su deteriorado estado emocional, físico y mental. Ahora se encuentra en la Unidad 44 bajo estrictas medidas de seguridad.
La investigación reveló que Cerfoglio no quiso dar las claves de acceso a su teléfono, lo que retrasó el análisis de los datos.
Sin embargo, se encontraron otros elementos que confirmaron el femicidio, como un video que muestra el momento en que el auto de Cerfoglio se desvía del rumbo y se incrusta en el río Quequén, y otro video que muestra al acusado golpeando brutalmente a Vera en la calle.
La autopsia de Vera reveló que murió por inmersión, pero también tenía golpes previos en su cuerpo, especialmente en el cráneo, rostro y cuello, que están relacionados a un caso de violencia de género.
