En diálogo con Radio Rivadavia, en Necochea Digital con los periodistas Quimey Marfil y Horacio Castelli, así lo expresó una de las figuras destacadas del fútbol local.
Haciendo una recorrida por sus comienzos, recordando sus 12 años jugando en Gimnasia, la práctica en la Escuela Cruz que lo catapultó a Estudiantes de La Plata y su periplo por el fútbol profesional hasta recalar en la década del ’80 nuevamente en el fútbol local.
Se mostró preocupado por la falta de dirigentes que sientan amor por la institución, y que entiendan qué significa dirigir un club.
Reconociendo sus posturas críticas, que muchas veces lo alejan de algunos sectores del fútbol local, no deja de analizar la situación actual de decadencia que se produce desde hace años.
Recordó que en la época que volvió a jugar en el fútbol regional, se ganaba muy bien y se podía vivir del fútbol, mejor que en algunos equipos de Buenos Aires.
Hoy es imposible que algún jugador pueda vivir solo de lo que gane en el fútbol del interior, sobre todo en esta zona, por cuestiones económicas que ha vivido el país y esta región.
Más allá de la visión del fútbol actual, sigue yendo a todas las canchas, incluso a partidos amistosos preparatorios para el campeonato local que está por empezar.
Sobre la designación por parte de la Liga Necochea de Fútbol, de denominar el campeonato de este año “Abel Coria”, le produce satisfacción, pero no le significa nada especial.
Recordó que su decisión de estudiar para director técnico fue complicada porque en ese momento, solo se dictaba en la AFA, y fue muy costoso, pero tenía decidido hacerlo.
Fue muy contundente al remarcar que los dirigentes buscan técnicos de inferiores resultadistas y no formadores.
Para Coria, no hay formadores como en el pasado, y que solo se busca el resultado en divisiones que deberían formar y que se diviertan.
Contó que, desde chico, el potero era su vida diaria, donde jugaban permanentemente y aprendían muchas de las jugadas que después llevaron a las canchas profesionales.