Ante la ola de calor que se pronostica en el distrito, la Secretaría de Planeamiento, Obras y Servicios Públicos municipal solicita a la población, sin limitar el consumo básico y necesario para la alimentación y la higiene personal, prestar atención a ciertas situaciones cotidianas que puede ayudar a reducir el derroche.
Debido a las altas temperaturas reinantes y una ola de calor que se anuncia para esta parte de la provincia de Buenos Aires durante toda la semana venidera, desde la Secretaría de Planeamiento, Obras y Servicios Públicos lanzaron una serie de recomendaciones y recordaron la importancia de hacer un uso racional del agua potable, evitando el gasto innecesario al máximo.
Sin limitar el consumo básico y necesario para la alimentación y la higiene personal, pero prestando atención a ciertas situaciones cotidianas en las que se desperdician grandes cantidades, con acciones simples se puede reducir considerablemente el derroche.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), se necesitan entre 50 y 100 litros de agua por persona por día para cubrir las necesidades básicas de higiene, tareas domésticas y cuidado de la salud, por lo que en una familia tipo, compuesta por cuatro personas, el consumo mensual no debería superar nunca los 12 mil litros, lo que equivale a 12 metros cúbicos.
Conociendo este dato, desde la dependencia que encabeza Adrián Furno sostuvieron que, para el llenado de una pileta de 2 metros de ancho, por 3 de largo y 1.5 de profundidad se precisan 9 mil litros, alcanzado las tres cuartas partes del consumo regular por hogar, por lo que recomendaron:
- Mantener limpia el agua con los productos químicos adecuados.
- Evitar renovaciones de forma innecesaria.
- Cuidar la higiene personal antes de ingresar a la pileta.
- Retirar la basura y mantener tapada su superficie para evitar que se ensucie.
En este mismo sentido, aconsejaron priorizar los usos esenciales, evitando actividades que puedan postergarse, y dieron algunos tips para el cuidado del este líquido esencial para la vida:
- Para lavar el auto o la vereda utilizar un balde y no mangueras.
- Regar por la tarde o muy temprano, cuando la temperatura baja, para que el agua no se evapore.
- No dejar correr el agua al lavar platos, manos o dientes.
- Ducharse rápido y, de ser posible, cerrar la canilla al enjabonarse.
- Cuidar más el agua cuando hay cortes de luz, por la posible detención de las bombas que alimentan los pozos.
Cerrar bien todas las canillas de tu casa puede significar un ahorro de hasta 30 litros de agua diarios; y de otros 50 si se evita el uso innecesario del inodoro. Limpiar la vereda o el auto en vez de baldear, significa la conservación de unos 300 litros, ducharse rápido y sin utilizar la bañera de unos 130 y cerrar la canilla mientras te cepillás los dientes o lavás los platos de cerca de 55.
Haciendo un hábito de estas simples acciones evitamos perjudicar a otros vecinos y vecinas y ayudamos a la conservación del medio ambiente, cuidando y queriendo un poco más el mundo que habitamos.