El nivel del agua en los embalses del sur de Francia ha bajado tanto que han quedado al descubierto sus indicadores, normalmente sumergidos. Los agricultores temen lo peor si no llueve pronto. En el país no ha caído lluvia en condiciones durante un mes.
En peligro el arroz italiano
En Italia, el río Po y el lago Garda están tan bajos como en pleno verano.
La peor sequía en setenta años y el pronóstico de pocos cambios en el horizonte pone en riesgo miles de cultivos en la temporada de siembra de cereales.
La alarma sobre la falta de humedad del suelo se ha extendido por el sur del contintente, desde España a Turquía.
Un patrón que se repite
«Lo que resulta realmente inusual es la recurrencia de estos hechos», comenta Andrea Toreti, del Observatorio Europeo de la Sequía. «Porque nosotros experimentamos sequía de severa a extrema hace un año y también en 2018. Lo que no tiene precedentes es la repetición de este patron».
Las próximas semanas serán clave. En el norte del país gran parte de la producción de arroz del pasado verano resultó perjudicada. Ahora intentan que los daños no se repitan.
«En el sector del arroz están probando un programa innovador de estrategias de gestión para usar el agua de una forma completamente diferente y evitar esos picos durante el período en el que también otros sectores necesitan agua. La adaptación es crucial», asegura Toreti.
A pesar de las inundaciones
Las recientes tormentas e inundaciones pueden dar una falsa impresión.
Los estudios realizados indican que el nivel de aguas subterráneas es bajo y la situación en Europa es precaria.
El reto ahora es encontrar nuevas formas de tratar los recursos de forma sostenible.
Euronews