martes, noviembre 26, 2024

Ecología

FMAM y Agenda 21 contra el cambio climático

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Estas son dos herramientas de alcance mundial han sido creadas con el fin de apoyar a todas las naciones, en su esfuerzo por proteger su medio ambiente y luchar de manera eficaz contra el cambio climático.

¿Qué es el FMAM?

El FMAM o Fondo para el Medio Ambiente Mundial es una organización financiera, cuyo objetivo es la preservación del medio ambiente. Fue creado en 1991 por el Banco Mundial, el PNUD (Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo) y por el PNUMA (Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente) y está conformado por más de 180 estados miembros, 32 de los cuales son los aportadores principales de los fondos necesarios para su gestión y funcionamiento.

En su papel de patrocinador financiero, el FMAM apoya proyectos ambientales dedicados al combate de la degradación de los suelos, la lucha contra el calentamiento global, la contaminación del agua y de cualquier otro que esté a favor del desarrollo sostenible y la protección de la biodiversidad.

Su objetivo principal es financiar proyectos que ayuden a los países en desarrollo a alcanzar los objetivos que se establecieron en la Convención Marco de la ONU sobre el Cambio Climático, la Convención de las Naciones Unidas para la Lucha contra la Desertificación, el Convenio sobre la Diversidad Biológica y en el Convenio de Estocolmo sobre Sustancias Orgánicas Persistentes.

¿Qué es la Agenda 21?

La Agenda 21 es un programa de acción que promueve el desarrollo sostenible en el siglo XXI. Fue adoptado en 1992 durante la ‘Cumbre de la Tierra’ celebrada en la ciudad brasileña de Río de Janeiro. El preámbulo del texto establece que dicha agenda abordará los problemas más apremiantes en cada momento y a su vez, intentará tomar medidas para prevenir problemas en el siglo XXI.

La Agenda 21 comprende 27 principios, entre los que se encuentran el desarrollo sostenible, el vínculo entre el derecho al desarrollo y la protección del medio ambiente, , la necesaria participación de los ciudadanos y el papel de la mujer y las necesidades especiales de los países en desarrollo.

Según su capítulo 28, el objetivo de la Agenda 21 es declinar los principios del desarrollo sostenible en las autoridades locales (regiones, departamentos, municipios, comunidades de municipios, comunidades de aglomeración, etc.), a través de agendas 21 locales, mediante las que las comunidades podrán definir y luego implementar planes de acción sostenible adaptados a sus propias necesidades.

Bajo la etiqueta de Agenda Local 21 es posible generar planes urbanos y/o reflexionar sobre la gestión de residuos, los sistemas de transporte y las políticas de turismo. El plan es involucrar a las poblaciones en cada etapa del proceso, dentro de un marco de actuación que puede ser restringido o colectivo.

Además, las consultas nacionales y/o regionales, como es el caso de la Unión Europea permiten a cada comunidad intercambiar experiencias y prácticas. En 1994, varias ciudades europeas firmaron la Carta de Aalborg, en la que abogaron por priorizar los imperativos del desarrollo sostenible y aplicarlos en las funciones urbanas. Esta agenda Local 21 ha tenido un rol formativo y ha permitido visibilizar y compartir experiencias que pueden ser aplicables a otros territorios similares.

La Agenda 21 apoya prioritariamente el desarrollo sostenible y fomenta que sus integrantes pongan en práctica acciones concretas, adaptadas a las prioridades y a los medios de cada localidad, tanto a corto, como a mediano y largo plazo.

El grave problema al que se enfrenta a veces es que, su eficacia se ve obstaculizada por la falta de coherencia entre iniciativas tan fragmentadas como diversas, algo que no contribuyen a generar una estrategia integral e integrada que dé soluciones reales, a los problemas que aquejan a las comunidades.

FUENTE: Ecoticias.com