Una terminal portuaria sumó una nueva cinta elevadora que aumenta la velocidad de embarque de 1200 a 2400 toneladas/hora y posibilita cargar dos tipos de productos diferentes de forma simultánea. La cinta se instaló paralela a la ya existente.
La obra, que demandó una inversión total de 6 millones de dólares, permite reducir los tiempos a la mitad, pero, sobre todo, genera que los costos de espera de toda la cadena productiva sean menores. Esto representa un avance muy importante dentro de un contexto donde los costos por demora de buques se han duplicado.
Este proyecto hace que Puerto Quequén, en general, aumenten de forma significativa su competitividad en el sector.
Hasta hace pocas semanas, un buque de 66.000 toneladas tardaba alrededor de tres días en cargarse, mientras que, gracias a esta incorporación, el próximo buque ya podrá partir hacia su destino en un día y medio.
El trabajo de construcción comenzó hace alrededor de un año y en la última etapa se añadieron los aspiradores de polvo para cuidar al ambiente.