El Gobierno de la Provincia de Buenos Aires, a través del Ministerio de Desarrollo de la Comunidad y la Dirección General de Cultura y Educación, asignó una partida adicional de $700 millones de pesos por mes e instruyó a los consejos escolares y a los municipios que tienen a su cargo la gestión del Servicio Alimentario Escolar, a ampliar esta prestación con una colación que será provista por las escuelas durante la actividad escolar presencial.
La colación se suma al módulo alimentario que se entrega desde el inicio de la pandemia, cuando debido a la suspensión de las clases presenciales fue necesario adoptar una nueva modalidad para este servicio que habitualmente se brindaba en las escuelas.
Los módulos alimentarios contienen el equivalente a un almuerzo y una colación por día y se entregan a 2.032.712 estudiantes de nivel inicial, primario y secundario.
La inversión del gobierno provincial para llevar adelante este servicio creció 327% desde marzo de 2020 a la actualidad, pasando de $1.098 millones a $4.697 millones mensuales.
El menú sugerido para el desayuno o la merienda dentro del establecimiento educativo fue elaborado por el equipo de nutricionistas de la Dirección Provincial de Seguridad y Soberanía Alimentaria, según las edades de las y los estudiantes. Incluye, entre otros, leche con cacao, té o mate cocido, yogur, cereales, galletitas, panificados y mermelada.
Para la implementación de esta medida, el gobierno bonaerense aprobó el protocolo para la reapertura de las cocinas y de los salones comedores en los establecimientos educativos de gestión estatal y de gestión privada, que se hará de modo gradual de acuerdo a las condiciones de cada establecimiento, comenzando los de las escuelas con residencia y albergue, que son en las cuales los alumnos y alumnas se quedan a dormir.
Durante la pandemia, con la presencialidad suspendida en buena parte del territorio bonaerense, el Servicio Alimentario Escolar (SAE) se viene brindando a través de viandas –módulos- que las familias retiran cada 15 días y contenían alimentos para ese período. Ese sistema –que atiende a unos 3 millones de alumnos a un costo de casi $3700 millones por mes- continuará mientras se va produciendo la reapertura gradual de los comedores.