El Papa aceptó la renuncia del obispo de Riobamba, Ecuador, presentada por monseñor Julio Parrilla Díaz, y la de su obispo coadjutor, monseñor Gerardo Miguel Nieves Loja.
El primero tiene más de 75 años, momento en el que suele darse la renuncia al gobierno pastoral, mientras que el segundo tiene solo 58 años.
El Vaticano no informa las razones de estos movimientos de la Iglesia de Riobamba, pero, según escribió el portal católico Religión Digital, los dos obispos habían sido acusados ;;durante mucho tiempo por misioneros locales de «comprar y vender'» sacramentos y bendiciones.
Con cartas abiertas, se les pidió eliminar esos aranceles (incluso para los funerales) y adaptarse al estilo del papa Francisco, quien condenó reiteradamente ese tipo de comportamientos por parte de algunos obispos y sacerdotes. (ANSA).
