Dos tercios de los italianos están desde hoy en «zona roja», y más de 39 millones de personas en cuarentena, con el resto en zona naranja, en un intento de frenar una ola pandémica que parece imparable.
Así se despide de la zona blanca -que implicaría una casi normalidad- la isla de Cerdeña, que hoy se levantó en naranja y con cinco municipios en cuarentena.
Un síntoma de que el virus no está bajo control, pese a la baja de nuevos casos en Italia, que hoy lleegaron a13.846, con 386 víctimas, con una tasa de positividad del 8,1%.
Los italianos comienzan así una nueva semana bajo restricciones, con la esperanza -remota, para muchas regiones- de que el lunes pueda haber una mejora y por lo tanto un cambio de color, al menos hasta el fin de semana de Pascua, cuando volverá el rojo en toda Italia, como prevé el decreto del premier Mario Draghi.
El caso-símbolo de la emergencia contagios es el de Cerdeña, que no solo volvió al naranja sino que sigue estando a la cola por la cantidad de vacunas aplicadas.
Peor aún es la situación para cinco municipios de la isla, que pasaron al rojo: a Sarroch (Cagliari) y Sindia (Nuoro) -que ya estaban en cuarentena durante la zona blanca- se suman Golfo Aranci, en Gallura, Samugheo, en la zona de Oristano, y Uri, en la de Sassari.
Logró en cambio evitar la zona roja Calabria, según anunció el presidente de la región, Nino Spirlì, al término de una mesa técnica con todas las representaciones.
No se excluye, sin embargo, que se dispongan cierres específicos sobre territorios particulares o provincias.
«Las decisiones -dijo Spirlì- serán tomadas sobre la base de los datos: municipio por municipio, y territorios más amplios que pueden coincidir con los provinciales».
También tranquilizó a los ciudadanos el gobernador siciliano, Nello Musumeci. «Hoy Sicilia, pese al aumento de los contagios en la última semana -dijo- no puede considerarse en zona de emergencia».
Las restricciones, según estimó la asociación Coldiretti, se traducen en una pérdida de 3.200 millones para bares, restaurantes, hoteles rurales y pizzerías, que perderán una vez más dos semanas consideradas de alta ganancia, las que están «a caballo» de las fiestas de Pascua.
Según la asociación, son siete millones los italianos que tradicionalmente comen fuera de casa en Pascua, con un gasto que equivale a los 400 millones, mientras el 32% tendrá que revisar sus programas en el largo fin de semana de «Pasquetta» (el lunes después de Pascua), que tradicionalmente se dedica a los paseos y las visitas a parientes y amigos, así como vacaciones.
También se ven duramente afectados los más de 24.000 hoteles rurales, que ya sufrieron pérdidas por 1.200 millones de euros.
En toda Italia, en el fin de semana, las fuerzas del orden controlaron a 188.000 personas, elevando 4.588 multas y 65 denuncias. En cambio fueron 27.000 los ejercicios comerciales controlados, con 150 sanciones y 59 cierres.
Durante la semana pasada, los controles fueron en total 815.089, con un aumento de un aumento del 6,3% respecto de los siete días precedentes.
Pese a las disposiciones anti Covid, se multiplican los casos de violaciones denunciados por las fuerzas del orden de norte a sur.
En Roma, diez estudiantes fueron multados por una fiesta nocturna en un departamento del barrio Nomentano, en tanto otros fueron sorprendidos comiendo y bebiendo en un restaurante.
Un episodio semejante se registró en la región de Parma, con una multa a 13 muchachos y la denuncia a uno hombre de 52. Diez personas, que paseaban por el centro de Forte dei Marmi, fueron sancionadas por la municipalidad, en tanto una adolescente de 17 años fue denunciada en Bolonia porque la sorprendieron paseando con una amiga, pese a la zona roja y a ser positiva al Covid.
Siempre en Bolonia, la policía local descubrió una fiesta de graduación. Y en Empoli, provincia en zona roja pese al naranja de la región Toscana, la alcaldesa, Brenda Barnini, emitió una ordenanda para prohibir el consumo de alimentos y bebidas en los espacios públicos.
Por su parte también Florencia, como admitió el gobernador Eugenio Giani, podría terminar en cuarentena en los próximos días. (ANSA).