Según informaron desde la empresa Transba, encargada del transporte de energía, el inconveniente se generó en uno de los transformadores de la Central Termoeléctrica y produjo la interrupción en el servicio.
Esta situación generó problemas en el desenvolvimiento de la ciudad, donde no funcionaron los semáforos, los pozos de agua no tuvieron energía para funcionar y provocaron el corte de agua potable.
Fue imposible comunicarse con la Usina Popular Cooperativa a raíz de la cantidad de llamados que colapsaron el sistema de comunicación.
Cerca de las 19 se restableció la energía en Necochea y Quequén, volviendo de apoco a la normalidad, aunque con mucho trabajo de los empleados de la usina y de obras sanitarias de la Municipalidad.