La alianza de católicos y evangélicos que nació al calor del debate por la ley para legalizar el aborto ahora avanza contra la ley de educación sexual integral (ESI) y este domingo demostró una vez más su poder de convocatoria frente al Congreso, con una manifestación masiva.
Los grupos «pro vida» que hicieron lobby contra el aborto en todo el país y que se hicieron conocer como «los celestes», creen que la ESI tiene una visión «ideologizada» y «corrompe la inocencia» de sus hijos.
La campaña «Con mis hijos no te metas» arrancó luego de que el pasado 4 de septiembre, en un plenario de las comisiones de Educación y de Familia, Mujer, Niñez y Adolescencia de Diputados se aprobara un dictamen para modificar la Ley de Educación Sexual Integral 26.150, que los celestes buscaron impedir.
La modificación busca garantizar la aplicación obligatoria de la ESI en todas las instituciones educativas del país, estatales o privadas, ya que hasta ahora sólo nueve provincias adhirieron a la norma.
El ministro de Educación, Alejandro Finocchiaro intentó salir a bajar la tensión y aseguró que el Gobierno no planea modificar la ESI, en un intento por llevar calma a estos sectores que no obstante decidieron movilizarse este fin de semana.
La concentración arrancó a las 17 y se replicó en varias ciudades del interior del país, con imágenes similares -aunque menos masivas- que durante las marchas que organizaron contra el aborto, que los llevaron incluso a comenzar a preparar un frente electoral para irrumpir en la arena política.
La movilización de este domingo fue duramente cuestionada por la asesora General Tutelar de la ciudad de Buenos Aires, Yael Bendel, en un comunicado que se dio a conocer el domingo por la tarde tarde.
«La postura irreductible de las personas que se oponen a la implementación de la ESI es inconducente y vulnera derechos» de los niños, dijo Bendel y afirmó que por su trabajo cotidiano saben que «las violencias y abusos ocurren en casi un 80% dentro del ámbito familiar o en los círculos cercanos» de los chicos.
La marcha de los celestes también buscó dar apoyo al ginecólogo Leandro Rodríguez Lastra, quien tendrá que afrontar un juicio oral por haber interrumpido un proceso de aborto que cursaba una joven que había sido violada, como contempla la ley de de interrupción voluntaria del embarazo (ILE).
El hecho ocurrió el 2 de abril de 2017 en la ciudad rionegrina de Cipoletti cuando Rodríguez Lastra, jefe del servicio de Ginecología del hospital Pedro Moguillansky, se negó a practicar la ILE porque la joven ya cursaba la semana 22 de gestación.
El llamado a marchar en todas las ciudades del país fue lanzado luego de que el grupo «El Bebito», de La Plata, ingresara a una escuela para interrumpir una clase que dictaba contenidos incluidos en la ESI, aprobada hace 12 años.
«El estado quiere corromper la inocencia de nuestros hijos. Quieren imponer con violencia una ideología destructiva contra nuestras familias», dice una voz en off en un video publicado por los organizadores.
La mediática Amalia Granata, la cocinera Maru Botana, el periodista Mariano Obarrio y la senadora nacional Cristina Fiore, algunas de las personalidades que apoyan la convocatoria, también grabaron su propio video llamando a marchar.
«Hace unos meses logramos rechazar entre todos el aborto en el Congreso», enfatiza Granata en ese video. La sigue la senadora Fiore asegurando: «millones de argentinos nos unimos ahora para que cuidemos las dos vidas». Obarrio es quien termina el spot: «para que los bebés puedan dormir tranquilos en la panza de su madre, millones de argentinos nos hemos despertado».
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