La policía identificó los 5 camiones que se apostaron en el ingreso de la playa en avenida 532 y 591, de Quequén dando curso a dos investigaciones que no derivaron en detenciones, aunque sí en la formación de las causas penales (infracciones a los artículos 158 y 194 del Código Penal).

La causa está en manos de la UFI Nº 30 y consta de elementos probatorios, registro fílmicos, fotografías y declaraciones testimoniales. Aunque fueron citados a declarar, los camioneros se negaron por concejo de sus abogados.

La formación de las causas contra los camioneros representa a las claras la manera que el Puerto Quequén ha decidido hacer frente a los conflictos con los transportistas: apelando a la fuerza pública negando cualquier posibilidad de diálogo.

Camioneros con diferentes afiliaciones mantienen protestas que se propagan no sólo por el pago sin servicios del uso de las playas de camiones sino también por los manejos espurios en el cobro de tarifas o los arreglos de transporte de carga que les recortan pagos de traspiles,

El último bloqueo de camioneros autoconvocados mantuvo el puerto cerrado por más de una semana mientras buena parte del directorio del Consorcio partía de viaje en una «misión» por la costa de Brasil. En aquella oportunidad se amenazó a los transportistas solicitando sus datos por orden judicial y con un seguimiento intenso de las fuerzas de seguridad.