Una almacenera fue estrangulada ayer tras una discusión en su casa y por el femicidio detuvieron a un camionero con el que mantenía una relación sentimental y a quien había denunciado a mediados del año pasado por amenazas.
El hecho ocurrió cerca de las 6 mañana en una vivienda situada en calle 83 al 3070, entre 66 y 68 de esa ciudad del sur de la costa atlántica de la provincia de Buenos Aires, donde la víctima, identificada como Mónica Graciela Benavídez (53), residía y también atendía su comercio «Mercado Moni».
Fuentes judiciales y policiales informaron a Télam que todo comenzó cuando un vecino de la almacenera llamó al número de emergencias 911 porque escuchó gritos que provenían de su casa.
Efectivos de la comisaría 1ra. arribaron al lugar, advirtieron que la puerta de la vivienda estaba abierta y, al ingresar, vieron que la mujer estaba tirada en el piso con una cuerda alrededor de su cuello.
Según las fuentes, el personal llamó a una ambulancia y los médicos constataron que Mónica ya estaba muerta.
Ante esa situación, la Policía comenzó a recabar datos para identificar a él o los agresores y para determinar el móvil del crimen.
Al respecto, los investigadores descartaron la hipótesis del robo ya que al lado del cadáver estaba su teléfono celular, por lo que centraron la pesquisa en el círculo íntimo de Mónica, quien mantenía una relación sentimental con un hombre casado con una mujer de 59 años.
Con esa información, efectivos de las seccionales 1ra., 2da. y de la Dirección Departamental de Investigaciones (DDI) realizaron un operativo en un domicilio de la calle 556 al 1100, en la vecina localidad de Quequén, partido de Necochea, donde aprehendieron al sospechoso, un camionero llamado Jorge Ricardo Ortega (48).
De acuerdo a las fuentes, el transportista tenía rasguños en el rostro y el mismo color de cabello que la Policía Científica encontró en la mano de Mónica, lo cual evidenciaría que ella intentó defenderse del ataque.
Por su parte, un jefe encargado de la pesquisa dijo a Télam que en agosto del año pasado la víctima realizó una denuncia contra el hombre por «amenazas» que recayó en el Juzgado de Familia.
La Justicia dispuso una restricción de acercamiento que duró unos meses pero luego de ese lapso Benavídez aseguró que la relación había «mejorado», por lo que cesó esa medida.
No obstante, hacía 15 días que la relación había culminado y los detectives intentaban establecer si esa situación motivo el ataque contra la víctima, la cual era madre de una hija.
Mónica se había mudado al barrio hacía unos 8 meses y su comercio, con una entrada independiente al de su domicilio y que da a la vereda, es el típico almacén donde se venden artículos de limpieza, comestibles, cigarrillos, lácteos, pan y hasta gas, carbón y leña, según se pudo observar en los dos carteles ubicados al frente del local, junto a la calle de arena.
«Estamos tomando testimonios a vecinos y familiares de ella para confirmar si se trató de un crimen en contexto de violencia de género», aseguró el vocero.
En tanto, los pesquisas recibieron esta tarde un adelanto de los resultados preliminares de la autopsia al cuerpo de la víctima en el que los médicos forenses determinaron la «asfixia por ahorcamiento» como la causa de muerte.
Además, los peritos de la Morgue Judicial Necochea determinaron que el cuerpo de la mujer asesinada también presentaba algunas lesiones por golpes, agregaron los voceros.
El hecho es investigado por el fiscal Eduardo Núñez, a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 10 Temática Especializada en Delitos contra la Integridad Sexual, Ciberpedofilia, Delitos Conexos a la Trata de Personas, Violencia de Género en el Marco Intrafamiliar y Violencia Infantil.
El funcionario judicial estuvo inspeccionando la escena del crimen y esta tarde tomaba una serie de declaraciones testimoniales para recabar la mayor cantidad de datos al expediente antes de indagar a Ortega por el delito de «homicidio agravado».