Italia, Alemania y Francia, tres países clave de la UE, serán protagonistas hoy en la isla de Ventotene de una reunión cumbre que afrontará diferentes temas fundamentales de la crisis europea.
La cumbre a la que participarán el premier Matteo Renzi, la canciller Angela Merkel y el presidente Francois Hollande tendrá lugar en Ventotene, lugar símbolo de la integración europea.
Fue en esta pequeña isla en las aguas frente a Nápoles donde tras ser encarcelado por el fascismo Altiero Spinelli -considerado uno de los «padres» del proyecto UE- escribó entre el 1941 y el 1944 un manifesto político a favor de «una Europa libre y unida» aún hoy recordado como un documento histórico.
El objetivo de fondo de los líderes de los tres países es el de dar un impulso a la UE, que está contra las cuerdas en diferentes frentes. La reunión apunta en otras palabras, explicó hoy Renzi, a relanzar «desde abajo» a la Unión Europea.
De una u otra manera, los tres líderes se encuentran en un momento muy delicado tanto en sus países como a nivel UE.
Renzi se está preparando para las difíciles negociaciones con Bruselas sobre el tema de la flexibilidad en la relación déficit fiscal/PBI, parámetro clave del que depende una parte del oxígeno con el que contará el gobierno italiano para impulsar el crecimiento de su economía.
Hollande apunta por su parte a acaparar más recursos destinados a las inversiones en el país y poder así, en un plano claramente político, relanzarse en vista de las elecciones francesas del año próximo.
Merkel se enfrenta a su vez a las fuertes presiones populistas internas: también en el caso de Alemania el próximo será un año electoral.
Los tres líderes tienen por otra parte una serie de problemas comunes: desde la expansión de la economía y las inversiones, hasta la seguridad y la defensa. Sin dejar por otra parte de lado la emergencia de los refugiados y -en el caso sobre todo de Italia y Francia- el tema del desempleo juvenil.
La otra cuestión clave, quizás la más delicada de todas, de la cumbre de Ventotene, es la de la relación inmigración-terrorismo. Respecto de este tema, los dos frentes más complejos son los de Libia y Siria. El encuentro se realizará en medio de fuertes medidas de seguridad. La reunión con la prensa al término de la cumbre tendrá lugar en el portaviones italiano «Garibaldi», donde se han acredidato alrededor de 300 periodistas.
Ventotene, que tiene una población de no más de 800 habitantes, está desde hace días protegida por los hombres de las fuerzas del orden y de los servicios secretos. (ANSA)
