Una vez más asistimos a declaraciones de políticos necochenses acomodadas según la conveniencia personal y los acuerdos políticos.
Quienes ayer decían que el ganador de cada elección debía conducir el HCD, hoy expresan que hay que sumar las dos últimas elecciones para definirlo.
No solamente hay que destacar la legalidad, sino también la legitimidad de las autoridades, y quienes hoy intentan seguir conduciendo el HCD de Necochea, han perdido en ambas franjas.
Legalmente perdieron las elecciones a intendente a través de los votos, y la legitimidad para representar a su sector por mucho mayor margen.
Fueron más de 12 mil sufragios que los votantes de Cambiemos les cortaron a Pablo Aued y Arturo Rojas, los principales referentes en la intención de quedarse con la presidencia del HCD.
Incluso, hilando un poco más fino y sin la contundencia de los datos concretos apuntados anteriormente, analizamos que, el no haber logrado un puesto en los gobiernos provincial o nacional también marcan una falta de legitimidad, dentro de su propio espacio.
Pero, sin caer en agravios, podemos decir, siempre con argumentaciones basadas en supuestos, que no han encontrado los dirigentes provinciales y nacionales capacidades suficientes en ambos postulantes.
Sí se puede sostener empíricamente, que la ciudadanía y el cuerpo político se han alejado de la forma de hacer política de ambos.
La postura de señalar a las personas que pueden o no hacer política o para ejercer cargos, los convierte en dirigentes alejados de la realidad.
La verdad que ninguno de los dos, tiene la experiencia, trayectoria o pergaminos suficientes para posicionarse como los árbitros de las capacidades y virtudes de las personas.
Los fundamentos para expresar sus negativas siempre se han basado en la incapacidad de los demás para ejercer los cargos a los que ellos aspiran.
La soberbia es mala compañía para quienes desean ejercer cargos públicos, que son simples herramientas para lograr a lo largo del camino, el bien común.
Quizás, y digo quizás, porque no lo puedo asegurar, el pensamiento de ambos dirigentes sea asegurarse sus lugares dentro de la política, para luego comenzar a trabajar por el conjunto de la sociedad. Este por ejemplo sería una forma, un estilo, que no comparto, pero acepto.
El problema de Pablo Aued y Arturo Rojas, es que, a pesar de su juventud, han sido y siguen siendo intolerantes con el que piensa y procede distinto.
Una demostración que todo puede cambiar, y que estamos en una etapa distinta como han declarado en muchas oportunidades durante la campaña, es que el próximo Presidente del HCD sea un representante del Frente Renovador-UNA de Necochea, quienes fueron los legítimos ganadores y tienen toda la legalidad y legitimidad de su lado.
Aued y Rojas son el pasado, ese pesado pasado que tienen,. ya fueron, y deberán entender que no pueden seguir tirando vidrios rotos al nuevo intendente, Ya se quedaron solos en la elección donde les cortaron 12000 boletas, 12000 boletas, o no entienden lo que paso, no los votaron los mismos.12000 boletas abajo, derrota catastrófica, por eso no tienen puestos más elevados, el macrismo sabe bien lo que hace.